Nicaragua necesita un millón de dólares al año para agilizar la repatriación de víctimas de trata de personas, ayudarlas a reconstruir sus vidas y endurecer las penas a los responsables de este delito, informó este lunes una fuente legislativa.
“Estamos hablando de un millón de dólares al año, por lo menos, para la repatriación de las víctimas” y para brindarles apoyo médico, psicológico y económico, afirmó a periodistas el presidente de la Comisión de Gobernación y Derechos Humanos del Congreso, el diputado Filiberto Rodríguez.
El legislador dijo que los fondos son necesarios para poner en marcha una reforma legal, actualmente en discusión en el Parlamento, que propone mejorar la atención a las víctimas y endurecer las penas a quienes esclavizan a las personas con fines sexuales y laborales.
Según la Policía, en los últimos cuatro años Nicaragua registró 110 casos de trata de personas, en su mayoría mujeres, sobre todo en las zonas fronterizas.
El proyecto, que impulsa la bancada del gobernante Frente Sandinista, pretendía inicialmente aplicar un impuesto de dos dólares a cada turista que ingresara al país para costear el programa de atención a víctimas, pero la idea fue desestimada debido a las críticas de la empresa privada que prometió buscar otras fuentes de financiamiento.
Actualmente las víctimas son atendidas principalmente por organizaciones no gubernamentales como Casa Alianza.
El oficialismo propone en su proyecto de ley aumentar de 12 a 25 años de prisión la condena a las personas que cometan este delito por medio de amenazas, intimidación, secuestro, chantaje y uso de la fuerza.