El Real Estelí recibirá hoy (8:00 p.m.) al Ferretti con una doble misión: jugar bien para gustar y ganar, olvidar su último encuentro y, si es posible, anotar el primer gol antes del minuto 33 para evitar que Denis El Pulpo Espinoza rompa el récord de imbatibilidad de Glen Omier.
Espinoza podría convertirse en leyenda en la casa de Omier, el Estadio Independencia, si mantiene la concentración, capacidad de reacción y el dominio de su área que ha mostrado en las 12 jornadas disputadas del Torneo de Apertura de Primera División.
El portero del Ferretti llegó a 680 minutos sin recibir goles. Y solo cede uno en 12 encuentros.
En su duelo ante el Tren del Norte el pasado miércoles, en el partido de reprogramación de la fecha 4, se convirtió en el guardameta que más cerca ha estado en los últimos 18 años de igualar la marca impuesta por Omier (713) con los estelianos.
Espinoza es la pieza principal del rompecabezas de Flavio Da Silva. El Ferretti está diseñado para defenderse bien y salir en velocidad con juego directo o de toques, dependiendo de ciertas circunstancias en el partido.
La victoria del Ferretti el pasado miércoles, la tercera en los 23 partidos contra Estelí, comprobó la mitad de la teoría de Da Silva para ser campeón: ganar en casa y empatar de visitante, resultado que al menos hoy pretende, para darle el impulso final a los capitalinos de que sí es posible vencer al poderoso rival.
El Ferretti anhela un campeonato nacional y se ha obsesionado con la Liga de Campeones de Concacaf, competencias dominadas por Estelí. Sin embargo, hoy podría dar un primer paso hacia su último objetivo si empata o gana ante un adversario que disputa reivindicarse consigo mismo ante su público.
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