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Unos 35 voluntarios de la UdeM y Upoli trabajan en el desensamblaje y clasificación de las piezas de las XO. LA PRENSA/ M. VALENZUELA

Las XO se transforman

Nada se pierde, todo se transforma. Es la descripción del trabajo que han emprendido la Fundación Zamora Terán (FZT) y la Red Nicaragüense de Emprendedores de Reciclaje (RedNica) al buscar las maneras para aprovechar las 39 piezas que integran una computadora XO.

Cada XO tiene 39 piezas.  Por medio de un diagnóstico se determina qué piezas pueden ser reutilizadas.  LA PRENSA/ M. VALENZUELA
Cada XO tiene 39 piezas. Por medio de un diagnóstico se determina qué piezas pueden ser reutilizadas.
LA PRENSA/ M. VALENZUELA

Nada se pierde, todo se transforma. Es la descripción del trabajo que han emprendido la Fundación Zamora Terán (FZT) y la Red Nicaragüense de Emprendedores de Reciclaje (RedNica) al buscar las maneras para aprovechar las 39 piezas que integran una computadora XO.

[doap_box title=”Convenios y nuevas metas” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]

En cinco años de trabajo, la Fundación Zamora Terán ha suscrito treinta convenios de colaboración con colegios, universidades y organizaciones.

El más reciente es el firmado con la Red de Emprendedores del Reciclaje Nicaragüense (RedNica).

Los convenios con universidades son suscritos para que los estudiantes realicen sus prácticas preprofesionales en la fundación a través del programa de voluntariado.

Además, como programa educativo, la fundación está promoviendo que los estudiantes que terminan el sexto grado y fueron beneficiados apoyen a las próximas generaciones, a través del mantenimiento y enseñanza del uso de las XO a los niños en las escuelas.

[/doap_box][doap_box title=”” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]51,200 córdobas es el equivalente en dinero del trabajo que realizan los 160 voluntarios de Fundación Zamora Terán a diario en los cinco centros de mantenimiento de las XO y otras áreas de la fundación.[/doap_box]

Tras cinco años de uso en el programa educativo Una computadora por niño, cinco mil XO han cumplido su vida útil, pero en vez de ser desechadas, están siendo desensambladas y transformadas.

Durante la última semana, unos 35 voluntarios, durante dos turnos por día, han trabajado en el desarme y clasificación de las piezas de las XO.

Seneyda García, quien tiene dos años de ser voluntaria en la FZT, explicó que antes de proceder a desarmar una XO, los voluntarios recibieron una capacitación en la que aprendieron a desensamblar.

“Hubo un día donde los muchachos de soporte técnico impartieron la capacitación, luego tuvieron prácticas de cómo desensamblar y cómo clasificar los componentes y ya al siguiente día vinieron a desensamblar las computadoras”, dijo García.

Previo al desensamblaje de las XO, soporte técnico realiza un diagnóstico de las computadoras para determinar qué piezas pueden ser de utilidad y cuáles serán entregadas a RedNica.

Partes de las XO, como los cargadores, serán utilizadas por RedNica para elaborar lámparas, además los recicladores están ideando qué otros objetos se pueden crear a partir de las piezas que ya no se pueden utilizar de las computadoras.

DONANTES DE TIEMPO

Para la FZT, el programa de voluntariado ha sido clave en el proceso de sostenibilidad como fundación.

Según Arlen Pérez Guadamuz, coordinadora de Comunicación de FZT, “el voluntariado es la columna vertebral del programa educativo, si no fuese por el trabajo de los 1,424 voluntarios que hemos tenido en estos cinco años, no podríamos decir que somos sostenibles”.

En el desensamblaje de las XO trabajan estudiantes de la Universidad de Managua (UdeM) y de la Universidad Politécnica Nicaragüense (Upoli).

Según Sofana Barreto, coordinadora del Programa de Voluntariado de la FZT, ponerle una cifra al aporte que hacen los voluntariados va en dependencia de cuánto se le pagaría al voluntario, porque actualmente no existe un precio estandarizado.

“Se calculan estas horas en dependencia de la preparación de los voluntarios, por ejemplo, nosotros contamos con estudiantes de Ingeniería en Sistemas, Relaciones Internacionales, licenciados en Mercadeo, entonces depende mucho cuánto se le pagaría a ese voluntario por la actividad realizada”, detalló Barreto.

Realizando un sencillo procedimiento aritmético, Barreto aseguró que, valorando en cuarenta córdobas la hora de trabajo de cada voluntario, en un día de trabajo cada voluntario aporta un promedio de 320 córdobas.

Esos 320 córdobas, al multiplicarlos por los 160 voluntarios, le aportan a la fundación 51,200 córdobas diarios.

Para voluntarios como Mario Alberto Vega Luna, estudiante de tercer año de Ingeniería en Sistemas en la UdeM, quien tiene unas treinta horas de voluntariado cumplidas, poder apoyar a la FZT es motivo de alegría.

“La experiencia ha sido muy buena. Cada día uno aprende una cosa distinta, yo nunca pensé que iba a estar aquí colaborando para los niños”, afirmó Vega.

Nacionales computadora XO Reciclaje archivo

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