Víctor Manuel Tenorio, de 54 años, vio impotente cómo los miembros de la Juventud Sandinista (JS) con mazo en mano derribaban las paredes de la casa donde habitó por veinte años. El terreno lo había comprado en 8,500 córdobas a don Enrique Mora (q.e.p.d.).
Tenorio era parte de un grupo de familias ubicadas sobre la calle Alexis Argüello, del barrio 18 de Mayo, que alegan que no están en riesgo.
Quienes no se sienten en riesgo en el barrio 18 de Mayo se oponen a una evacuación. Pero en unas horas Tenorio vio el patio limpio como si allí no hubieran habitado 15 personas. Al igual que a las otras 400 familias que han sido evacuadas en ese barrio, le embargaba la incertidumbre sobre su futuro inmediato. La primera dama Rosario Murillo dijo a través de medios oficialistas ayer que contabilizan 821 familias evacuadas de puntos críticos en Managua.
Tenorio ni siquiera sabía a qué albergue lo llevarían, pero debió dejar botado cerdos, gallinas, conejos y caballos. Las seis familias que le antecedieron la noche del miércoles subieron a los camiones del Ejército y eran las 12:00 de la noche y allí permanecían, “no sabían adónde iban”, comentó uno de los vecinos.
Tenorio dice que aceptó porque los que llegaron a evacuarlos “se me pusieron muy agresivos”. A Tenorio le alegaron que debía salir porque cerca de su casa hay un desaguadero de una represa. Sin embargo, él sostiene que en veinte años nunca hubo riesgo.
Las familias que aún habitan en ese barrio, escenario de una tragedia reciente, permanecen en zozobra ante las amenazas de evacuación de parte de la Alcaldía de Managua, sin que les ofrezcan una alternativa de reubicación.
LA PRENSA/D. LÓPEZ
RECURREN ANTE CPDH
Cuatro representantes de ochenta familias de la calle Alexis Argüello, recurrieron ante la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) para denunciar que están en riesgo de evacuación.
“Mi casa es nueva, he invertido arriba de 20 mil dólares”, expresó Jorge Luis Castillo, uno de los denunciantes, mientras Escarla Navarrete aseguró que únicamente saldrán si les entregan “llave en mano” de la casa que les sea construida en compensación, pues ella y su familia no están dispuestos a trasladarse a un albergue.
El asesor de la CPDH, Pablo Cuevas, que recibió la denuncia manifestó que las autoridades no han abordado adecuadamente el problema. “Es lógica su preocupación dado que el esfuerzo de su vida en este momento está en riesgo”, expresó Cuevas.
Al mediodía de ayer, los soldados debieron retroceder con los camiones ante la resistencia de un grupo de vecinos que empezaron a lanzar piedras en rechazo a la presencia de los militares y que llevó a dos patrullas policiales a presentarse al sitio.
La delegada de la Alcaldía de Managua, Jeniffer Porras, negó que tengan programado más traslados, y que será posteriormente que llegará una comisión técnica a realizar las evaluaciones. Extrañamente los camiones de traslado permanecían en otra parte del barrio. Al caer la tarde, llegaron “analistas de la Alcaldía” que tomaron fotografías “pero no dijeron nada”, dio María Luisa Cubillo, quien no descartó más evacuación.
Muchas de esas casas fueron levantadas con apoyo de la misma Alcaldía de Managua, y según sus propietarios, algunos de ellos cuentan con títulos extendidos por la comuna.
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