Las autoridades municipales de Nindirí se hacen las ciegas y sordas con respecto al mal estado de la transitada y principal vía a Veracruz, una zona densamente poblada. Los baches, que cada día son más grandes y numerosos, dificultan el paso de los vehículos que la utilizan para entrar o salir de Managua como ruta secundaria de la Carretera a Masaya. Ante el desinterés de la Alcaldía por repararla, los habitantes del lugar han intentado mejorar el camino al rellenar los huecos con restos de materiales de construcción y tierra, pero el esfuerzo ha sido en vano porque queda igual luego de una lluvia.
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