Cuatro mineros artesanales murieron tras un derrumbe a las 7:30 de la noche del lunes, a orillas de un paredón de 15 metros, a un kilómetro de la comunidad El Rincón de los Garcías y siete kilómetros al sureste del municipio de Villanueva, Chinandega.
La tragedia ocurrió cuando un grupo de nueve comunitarios efectuaban un corte de tierra, el que procesan para extraer el oro.
Previo al desastre llovió. Las víctimas son Víctor Manuel Andrade García, de 20 años; Freddy Escorcia Ramírez, de 36; Luis Felipe Gómez Sánchez, de 45, conocido como “Felipín”; y Eynard López Santana, de 24 años.
Tras el derrumbe de toneladas de tierra sobre cuatro de los buscadores del mineral precioso lograron extraer de la orilla sur el cadáver de Víctor Manuel Andrade García, de 20 años.
Los otros tres mineros artesanales quedaron sepultados bajo toneladas de tierra a orillas del paredón por lo que se requirió otro equipo retroexcavador y un Caterpillar para remover la tierra y piedras desde la medianoche y el amanecer de ayer martes.
Luis Felipe Gómez Sánchez fue extraído a las 3:21 de la madrugada, Freddy Escorcia a las 3:48 de la madrugada y Eynard López Santana a las 9:58 de la mañana. La sugerencia de la doctora forense Silvia Villegas fue sepultarlos de inmediato.
En la zona destacaban representantes de la Alcaldía de Villanueva, 24 integrantes de la Unidad de Búsqueda y Rescate de la Dirección General de Bomberos, soldados del Segundo Comando Militar, bajo la jefatura del coronel Ilich Vladimir Martínez, agentes policiales y representantes del Ministerio de Gobernación.
AUTORIDADES ALERTA
El comandante bombero Javier Amaya dijo que es difícil el acceso a zonas inestables y el mayor peligro es que no se toman precauciones para una labor segura.
El alcalde sandinista Juan Fernando Gómez expresó que Marena y Sinapred, entre otras instancias, valorarán las condiciones de la mina.
Los yacimientos en Villanueva corresponden a Tizate, Mina de Agua, Rincón de los Garcías, cerro La Esperanza y El Quemado, donde el 10 de marzo se originó un derrumbe que dejó una muerte y cuatro lesionados.
SOBREVIVIENTES LAMENTAN TRAGEDIA
Juan José Uriarte Osabas, uno de los sobrevivientes, afirmó que antes del incidente trabajaban con el equipo roca-martillo (para extraer tierra).
“Pero parece que el terreno quedó vulnerable por la máquina que estuvo golpeando. Nosotros preveíamos el peligro, lamentablemente ocurrió, en el primer derrumbe el conductor de la retroexcavadora me dijo que le alumbrara para ver dónde habían caído los compañeros y cuando le mostraba vi arriba el peligro y salí, pero la misma tierra me tiró, me zafé a tiempo y caí sin recordar nada por el dolor en la boca del estómago y en la cabeza”, declaró Uriarte.
Donald Smith, quien se dedica a la compra de tierra para procesarla en rastras artesanales, salió a tiempo cuando la tierra se desplomó y sufrió un golpe en la mano izquierda. Aun nervioso agradece a Dios por estar vivo.
María Santana lloró al ver el cadáver de su hijo Eynard López y recordó que se había graduado de bachiller.
Margarito Andrade es otro de los sobrevivientes, quien corrió por su vida al advertir el alud de tierra y piedras. Narró que entre la oscuridad gritó a su hijo Víctor Manuel Andrade García que saliera, pero este se estrelló en la retroexcavadora y le cayó gran parte de la tierra.
Fue extraído sin vida a las 8:30 de la noche del lunes, una hora después del derrumbe.
Margarito Andrade indicó que el terreno de la mina pertenece a Leonardo Trujillo, quien les permite “rebuscarse la vida”.
EN GRUPOS DE VEINTE
En la mina de cielo abierto hay sesenta trabajadores de la comarca El Rincón de los Garcías, territorio vecino a la Mina de Agua, Los Laureles y límite con el Sauce, León, quienes en grupos de veinte efectúan labores en turnos de 24 horas, sin utilizar los equipos adecuados.
El sobreviviente William Martínez García, conductor de la retroexcavadora fue trasladado al centro de salud de Villanueva por los golpes y excoriaciones.
La falta de empleo obliga a efectuar peligrosas labores de extracción de oro sin equipos de seguridad.
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