Bertold Brecht o Pablo Neruda, Mahmud Darwisch o Bei Dao, todos ellos muestran esa tendencia en la que la voz del poeta interviene en política de una u otra manera, desde la adhesión a una causa a la denuncia del horror.
“Niemals eine Atempause (Nunca un respiro) es el título de la antología, recién publicada por la editorial Kiepenhauer & Witsch, que parte de la tesis de que en el siglo XX los poetas se vieron obligados ante los horrores cotidianos a dejar atrás la estética del arte por el arte, típica de la segunda mitad del siglo XIX.
En el libro, su compilador Joachim Sartorius abarca el auge del comunismo, la revolución cubana y los movimientos de liberación en el llamado tercer mundo, incluyendo a Latinoamérica.
Ver en la versión impresa las páginas: 6 B