En la administración de operaciones de una flota de transporte de productos peligrosos, principalmente, combustibles, típicamente deben desarrollarse 11 elementos principales de un programa de seguridad.
1. Liderazgo gerencial: Tiene que ver con el apoyo declarado de la gerencia, no solamente en términos de coordinación o presupuestación para los requerimientos de seguridad, sino en el establecimiento de objetivos y metas precisas. Lo exactamente opuesto a tener una meta de seguridad es repetir “cero accidentes” sin ninguna reflexión, puesto que lo correcto es expresarlas como porcentajes de reducción de los tipos de incidentes más frecuentes, mediante la implantación de acciones correctivas, indicadores de desempeño e iniciativas de mejora.
2. Política escrita de seguridad operacional: Es absolutamente necesario contar con una declaración que sea conocida por todos, en donde se oriente a la acción individual y colectiva en términos de los comportamientos seguros que deben seguirse al conducir los equipos de la empresa.
3. Asignaciones de responsabilidades de Seguridad: Lo que no está escrito no existe, puesto que cada descripción de puesto —no solamente las de los conductores sino también del personal administrativo de flota— deben tener incluidas los deberes específicos de seguridad aplicables a su posición.
4. Reporte de incidentes: Debe estar desarrollado el proceso de reporte de incidentes, como una responsabilidad de ineludible cumplimiento. La investigación y análisis de los percances operacionales debe realizarse bajo un protocolo establecido que señale los miembros específicos del equipo (entre mayor jerarquía mejor) para realizar una investigación significativa con una metodología predefinida.
5. Proceso de selección de conductores: Si su empresa no posee un sistema en el cual se prospecte, indague, investigue y seleccione adecuadamente a los conductores entrantes al equipo, entonces prepárese para el vértigo y las sorpresas desagradables, ya que mayoritariamente usted estará ingresando personal con hábitos cuestionables para que probablemente contaminen a sus conductores profesionales.
6. Seguridad integral: Es importante que su flota cuente con todos los mecanismos modernos de seguridad pasiva y activa, incluyendo los dispositivos electrónicos de monitoreo, alarmas y alerta temprana. Es común en empresas desarrolladas el uso de cámaras de vídeo permanentes por obligaciones de las compañías de seguros, pero sobre todo, para la determinación clara de responsabilidades en caso de incidentes.
7. Seguridad del personal: Debe confeccionarse una guía o Manual del Conductor profesional a su propia medida. Nada de “fusilarse” modelos copiados de internet. Este documento debe tener en específico las normas operacionales así como los límites de horas de conducción y trabajo aplicables, entre otros temas claves.
8. Seguridad fuera del trabajo: En algunas empresas se les recuerda bajo firma periódica a los empleados la responsabilidad individual en la administración de su tiempo personal, ya que esto tiene una implicación altamente riesgosa para la correcta conducción de estos equipos.
9. Supervisión de seguridad: Es fundamental contar con un proceso de monitoreo y formación de comportamientos que involucre al supervisor como un mentor , más que con el enfoque equivocado de capataz o de policía.
10. Incentivos a los comportamientos correctos: Es necesario que usted reconozca meritoriamente mediante estímulos no monetarios las actitudes seguras de sus conductores, especialmente quienes hayan alcanzado los objetivos personales y colectivos. En esto no hay ahorros, lo que se instruye a hacer correctamente, es de naturaleza humana repetirlo si la conducta se incentiva suficientemente.
11. Capacitación adecuada: Establecer un proceso de aprendizaje continuo que aliente a los conductores a expresar sus áreas de mejoras, ya que frecuentemente la cultura colectiva imperante e incorrecta inhibe y etiqueta negativamente a quienes preguntan para clarificar dudas o eliminar lagunas de aprendizaje.
(*) Consultor en Seguridad Industrial.
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