Ante el fenómeno “Mar de Fondo” que se está viviendo en las costas del Pacífico, con olas de hasta casi tres metros de altura, los pescadores de La Boquita han sido afectados porque el agua ha entrado hasta los ranchos que prestan servicios de restaurantes —a orillas del mar— y no tienen chance de ubicar sus lanchas en un lugar más seguro para que no sean destruidas por los fuertes oleajes.
La propuesta ante el alcalde de manera verbal, que realizaron los demandantes este martes, consistió en que se haga un reordenamiento sobre la costa y que de manera urgente se les dé un espacio donde puedan ubicar sus embarcaciones, mientras la marea vuelve a la normalidad.
Estas personas dedicadas a la pesca han tenido que ubicar su única herramienta de trabajo en sus casas, otros sobre la calle y algunos que se la miran sin remedio amarrarlas sobre algunos postes o árboles.
“El mar tira las lanchas, les da contra un muro y las quiebra, pero los comerciantes se oponen a querer darnos lugar”, dijo Pablo Roberto Noguera Velásquez, pescador.
Hasta el momento una lancha es la que ha sido dañada en esa zona, producto de las altas marejadas, y los daños podrían ser cuantiosos para repararla.
En la actualidad uno de esos medios de transporte se cotiza en cinco mil dólares, aproximadamente, sin incluir el motor.
Baltodano, ante la problemática planteada, mandó a un equipo de la Alcaldía a realizar una inspección en el área, con el objetivo de brindarles respuesta inmediata a los pescadores.
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