Aunque el asesor para Asuntos Económicos de la Presidencia, Bayardo Arce Castaño, admitió ayer que “los logros de la economía lamentablemente” no están teniendo un impacto generalizado en la población, celebró que el Banco Mundial les notificó que Nicaragua ya no formará parte de un programa que le permitía obtener donaciones y tasas crediticias bajas.
“Obviamente que los logros de la economía no tienen lamentablemente un impacto inmediato en toda la población”, reconoció Arce ante empresarios de la Cámara de Comercio Americana (Amcham), donde se le pidió que explicara el efecto positivo que el crecimiento estaba teniendo en los nicaragüenses.
Y añadió: “Desgraciadamente no tienen esos efectos (positivos), máxime en un país con un rezago como el que tenemos nosotros, pero eso no implica que descuidemos el objetivo de esta política económica (del Gobierno sandinista) que es salir de la pobreza”.
Aun así, el asesor presidencial anunció que el 13 de mayo recibieron la visita de una misión del Banco Mundial, la que les notificó que Nicaragua en junio ya no formará parte de los programas de la Asociación Internacional de Fomento, mediante el cual el país recibía donaciones y créditos altamente concesionales.
Según Arce, debido a que el PIB per cápita local está rozando los dos mil dólares, el BM ha decidido sacar al país de ese programa, lo que implicará que Nicaragua reciba préstamos con plazos más cortos, tasas más elevadas y sin donaciones. “Para estar en ese programa el país debe tener durante tres años seguidos un PIB per cápita menor a 1,215 dólares”, precisó.
“Eso significa que en el futuro nuestros programas no van a llevar donaciones y los términos de los préstamos ya no van a ser tan concesionales. Esto implica que lo que antes nos venía como donación, ahora nos vendrá como préstamos”, dijo Arce, quien a su vez añadió: “ A mí me alegra salir de AIF (las siglas en inglés del programa), me alegra salir del club de los (países) miserables”.
El asesor presidencial aclaró que los programas crediticios ya contratados y sin utilizar no serán afectados, al menos hasta el 2019, cuando vence el programa financiero pactado con el BM.
EL PESO DE LAS DONACIONES
Y si bien el Gobierno minimizó la salida de Nicaragua de ese programa, lo cierto es que el Banco Mundial figura como una de las principales fuentes de donación del país.
En 2014, según el informe de cooperación externa, del total de donaciones (92.2 millones de dólares) que recibió el sector público de fuentes multilaterales, 28.8 millones de dólares fueron aportados por el Banco Mundial.
Arce dijo que ahora que ya no forman parte de este programa, se lanzarán a la búsqueda de financiamiento comercial para lo cual contratarán a una calificadora de riesgo que les permita mejorar la nota del país.
INSTITUCIONALIDAD ES “CHAGÜITE” PARA ARCE
Carlos Langrand, diputado de la Bancada Alianza Partido Liberal Independiente, dijo que aunque el Gobierno celebra esa decisión del BM, lo cierto es que esa medida llega en mal momento, principalmente cuando la cooperación de Venezuela está secándose y además la economía da señales de estar creando insuficiente riqueza para reducir pobreza.
“Crecer 4.5 por ciento para Nicaragua es crecer el uno por ciento de la economía costarricense, para que Nicaragua alcance los niveles del PIB per cápita de Costa Rica se necesita amarrar las manos a los ticos para que no crezcan y nosotros durante ochenta años crecer a un ritmo de 4.5 por ciento”, recuerda el diputado miembro de la Comisión Económica de la Asamblea.
Durante el periodo de preguntas, Langrand y el diputado Eliseo Núñez plantearon a Arce la necesidad de devolverle al país la institucionalidad, apostar a una mayor inversión en educación, elevar la productividad, renovar la matriz productiva, demandas que el asesor presidencial descalificó como “chagüites”.
En tono de burla, Arce dijo que pediría al presidente de la Asamblea Nacional, René Núñez, que diera más tiempo en las intervenciones de ambos diputados durante las sesiones para que expusieran “el chagüite” que ambos dijeron durante el encuentro con los empresarios.
Pero Langrand dijo que si al país se le devolviera la institucionalidad se crecería ocho por ciento y no 4.5 por ciento, que es insuficiente para sacar a más del cuarenta por ciento de los nicaragüenses que viven con menos de dos dólares al día.
Por su parte, Núñez manifestó que Arce obvió responder a temas tan sensibles como parte de la política de autoritarismo que ha implantado, lo que ha generado mayor inequidad en el país.
EMPRESARIOS NO PREGUNTAN
El diputado de la Banca Alianza Liberal Independiente, Eliseo Núñez, dijo que aunque el Gobierno insiste en que hay un diálogo abierto, el sector empresarial está atemorizado y teme represalias en caso de que cuestione.
Y es que a pesar que el encuentro del asesor económico presidencial, Bayardo Arce, era exclusivamente con los empresarios, solamente los diputados liberales y un dueño de medios de comunicación hicieron consultas.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio Americana (Amcham), Roberto Sansón, reconoció la necesidad de que se reabra el debate sobre la inversión en Educación y Salud. Sansón admitió que “la audiencia no preguntó” de esos temas sensibles y que debieron discutirse.
Sansón refirió que espera que el hecho de que Nicaragua recurra a una calificadora de riesgo internacional, presionará al país para mejorar su institucionalidad.
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