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Breve epístola

Cada vez que algo te decía —ayer en el evento— me hundía en tu pelo como en una cortina de lluvia & me tomaban tus ojos para situarme más allá de la dicha y del Paraíso

Cada vez que algo te decía
—ayer en el evento—
me hundía en tu pelo
como en una cortina de lluvia
& me tomaban tus ojos
para situarme más allá de la dicha
y del Paraíso

Por eso quería decirte secretos a cada rato
Para husmearte Para Olerte Para sentirte

Piel viva más allá de mi piel
Piel mía en vos
Distancia de las frutas amanecer de los besos
Columpio de los deseos
Balancín de la incertidumbre
Certeza y cereza del amor

Por eso me hundía en vos
Por esa locura
Perdí la perspectiva Nevsky
Me sentía libre de respirarte
Sabiendo que en cada soplo
Me das la vida no como dádiva ni óbolo

Más bien como un regalo de tu ser
Profundo & misterioso

Me das para mi dicha
Tus ojos donde anida el amor
Tus manos donde brilla la ternura

Por ahora y solo por ahora
No puedo impedir que sufras
En esta esquina de la vida
Pero tampoco
Puedo dejar de amarte
Frente al huracán del invierno

Cultura Anastasio Lovo Poesía nicaragüense archivo

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