El volcán Concepción continúa activo. Según el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter), durante el pasado fin de semana registró 24 explosiones de gases.
En conferencia de prensa a medios oficialistas, Armando Saballos, asesor de Vulcanología del Ineter, informó que desde que inició actividad eruptiva el Concepción en abril de este año, hasta la mañana de ayer se registraban 2,622 explosiones.
Según Saballos, aunque las emanaciones de gases son bajas, “le pedimos a la población que no suba al cráter porque puede ser peligroso”.
Sobre el comportamiento del resto de la cadena volcánica, Saballos indicó que están en calma relativa.
ESPERANZA DE LLUVIA
La presencia de una vaguada débil podría generar algunas lluvias, sobre todo en el Caribe, donde estarían los mayores acumulados.
Conforme la cantidad de lluvia que podría caer, tras el Caribe se ubica la zona Centro y Sur del país, así como en la región Norte, según informó la mañana de ayer Marcio Baca, director de Meteorología del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter).
Según explicó Baca, la vaguada se originó producto del incremento de bajas presiones durante el domingo.
Para la región del Pacífico las lluvias serán aisladas y hay más posibilidades en la Meseta de los Pueblos (Masaya y Carazo), así como al sur del Rivas.
Sobre las lluvias del fin de semana, Baca detalló que las lluvias más importantes se registraron en el Caribe Sur y en las regiones Centro y Sur del país.
Una vaguada se forma por el ascenso de masas de aire cálido y húmedo a lo largo de una zona alargada de baja presión atmosférica que se ubica entre dos áreas de mayor presión, formadas por masas de aire mucho más frío y pesado que dan origen a una formación de nubes de gran desarrollo.
TELICA EN CALMA
Aunque la actividad en el volcán Telica ha sido poca, Armando Saballos, asesor de Vulcanología de Ineter, hizo un llamado a la población cercana a estar siempre atenta ante el comportamiento de este coloso.
El Telica entró en fase eruptiva en mayo de este año y registró fuertes explosiones acompañadas de gases y ceniza que afectaron a poblaciones cercanas al coloso.