Han pasado tres meses desde que el Gobierno de Nicaragua, a través del asesor de asuntos económicos, Bayardo Arce Castaño, anunció que se realizaría una revisión al pliego tarifario; sin embargo, hasta la fecha se desconoce si la revisión está en proceso o si quedó estancada. Actualmente el pliego contiene 92 tarifas, que son definidas por el uso final de energía, haciendo el sistema más complejo, lo cual no cumple con la Ley, que dice que el sistema es fácil de entender.
La Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides) propuso hace meses definir un nuevo pliego tarifario en función del nivel de tensión y el consumo en hora pico o fuera de hora pico; la simplificación del mismo incentivaría a la población a un uso más eficiente de energía.
Juan Sebastián Chamorro, secretario ejecutivo de Funides, explicó que estando el pliego tarifario definido por el uso final de la energía, trae mucha complejidad y una reforma ayudaría al crecimiento económico del país, por lo tanto la revisión del pliego es algo que se debe hacer para el beneficio de todo el país.
“Se aplicó el decreto y se logró un ajuste, pero no se hizo la revisión del pliego y creo que es necesario que se haga, es algo bastante complicado porque requiere de estudios, análisis de consumo, pero es (un) tema importante; tenemos países centroamericanos que tienen hasta treinta tarifas, el problema de Nicaragua es que está definido por el uso final de energía, en cambio en otros países se define por el uso total de energía consumida”, sostuvo Chamorro.
Funides propone definir una categoría de tarifa social de manera escalonada para aquellos que consumen 150 kW o menos; y para el resto del sistema definir un nuevo pliego tarifario que no esté en función del uso final de la energía. Además propone definir el pliego tarifario en función del nivel de tensión (baja, media o alta) a fin de hacerlo más fácil de comprender e incentivar el uso eficiente de la energía.
“El último estudio del pliego se hizo en tiempo de (Enrique) Bolaños y si hicieron otro, nosotros lo desconocemos. Si se reduce el pliego, los usuarios tendrían un sistema más simple, podrían racionalizar su consumo y sería más fácil de entender que el que está vigente”, indicó Chamorro.
Nicaragua es el país de Centroamérica con más tarifas.
“Actualmente hay una tarifa para el sector domiciliar, comercial e industrial, luego de estas tres categorías tenés que si son grandes, pequeñas o medianas y por otro lado hay que dividir en que si consumen en hora pico o no, toda esta situación te lleva a (una) situación tarifaria compleja y discriminatoria”, sostuvo.
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