Cáritas de Nicaragua, el brazo social de la Iglesia católica en el país, pidió ayer al gobierno del inconstitucional presidente Daniel Ortega que decrete estado de emergencia para el Corredor Seco del país, donde se ha perdido la cosecha de primera y se corre el riesgo de perder la de postrera, por la prolongada sequía.
“Las consecuencias de la sequía son muy serias y por ese principio que pregona con los pobres, creo que es el momento que (el Gobierno) se dé a conocer”, exhortó el obispo Carlos Enrique Herrera, presidente de Cáritas de Nicaragua.
Herrera, también obispo de la Diócesis de Jinotega, estima que más de diez mil familias se encuentran afectadas por esta situación en 185 comunidades del Corredor Seco.
El jerarca católico instó al Gobierno a que busque la cooperación internacional, ante la realidad social que están viviendo alrededor de sesenta mil personas de la zona seca que comprende León, Chinandega, Nueva Segovia, Madriz, partes de Matagalpa, Jinotega, Chontales y Granada.
“Que el Gobierno busque la cooperación internacional para estas zonas, donde cada día aumenta más la población afectada por las consecuencias de la sequía”, exhortó el obispo Herrera.
El miembro de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) también pidió a los alcaldes de la zona seca del país que informen de forma veraz al Gobierno central sobre las consecuencias de la sequía.
“Este es un problema real y el Gobierno no puede seguir ignorándolo, para que se dé una solución a la crisis de la sequía”, consideró el obispo Herrera.
También lamentó que en medio de la crisis de hambruna que ha generado la sequía, el Gobierno entregue paquetes alimenticios solamente a la población partidaria.
“Eso no debería ser así, se debe atender a toda la población sin ver su situación ideológica; hay que ver su necesidad”, aseguró el prelado.
ENCUENTRO CON DIRECTORES DIOCESANOS
Los directores de las Cáritas diocesanas se reunieron ayer en la CEN, donde hablaron del impacto de la sequía en la zona de Nicaragua y sus conclusiones son de que el Gobierno debe tomar acciones urgentes, entre estas adoptar el estado de emergencia.
“La crisis alimentaria es grave. Nosotros lo hemos dicho con conocimiento de causa. Visitamos las zonas; somos parte de la zona y vemos palpable que la sequía tiene con hambre a miles de familias que urgen ser atendidas”, sostiene Noé Sevilla, coordinador de proyecto y seguridad alimentaria de la Diócesis de Estelí.
Luis Carlos Rayo, técnico de emergencia de la Diócesis de Jinotega, en su exposición fue categórico al recomendar al Gobierno decretar el estado de emergencia.
“La sequía viene progresiva desde 2013, pero este año la situación es grave en el Corredor Seco de Jinotega y como consecuencia los afectados son miles”, detalló Rayo.
El técnico dijo que ante la gravedad de la sequía, las Cáritas diocesanas, por medio de la caridad de la población, han buscado la recolección de alimentos para socorrer a algunas familias que sufren hambre.
“Creemos que una de las cosas importantes es que el Gobierno verifique bien las zonas afectadas del Corredor Seco y decrete el estado de emergencia; la situación es tan grave que la gente afectada vende su ganado y sus aves para poder subsistir y creo que esto más bien afecta la estabilidad de las familias”, lamentó el funcionario de Cáritas de Jinotega.
ESPAÑOLES DISPUESTOS A APOYAR
En el encuentro de los directores de las Cáritas de todo el país estuvieron presentes cooperantes de Cáritas de España, quienes aseguran estar dispuestos a apoyar a las familias afectadas por la sequía.
Ana Cristina García, coordinadora de cooperación internacional para América Latina de Cáritas España, indicó que están preocupados por la situación de las familias del Corredor Seco.
“No imponemos ningún tipo de intervención a las Cáritas, son ellos quienes considerarán cuáles serán las acciones necesarias para la población, nuestro único criterio es atender a las personas más vulnerables”, dijo García.
ENVIARÁN CARTA A ORTEGA
El director nacional de Cáritas de Nicaragua, Uriel Vallejos, informó que preparan una carta bien detallada sobre el impacto de la sequía, que será enviada al presidente inconstitucional Daniel Ortega, en la que se le solicitará con urgencia decrete el estado de emergencia para el Corredor Seco. “El llamado es que se priorice a la población afectada, porque los datos que tenemos son alarmantes y necesitamos unir apoyo para socorrer a nuestros hermanos que sufren hambre”, dijo Vallejos.
El sacerdote también recomienda al Gobierno que no excluya a las familias cuando las asistan con alimentos.
“Sabemos que cuando el Gobierno hace entrega de alimentos, lo hace solo a familias ligadas a su gobierno y eso no es correcto”, expresó el director de Cáritas.
Por su parte, Agustín Alvarado, coordinador del área de Emergencia y Vulnerabilidad de Cáritas de Nicaragua, sostiene que el impacto de la sequía es devastadora para miles de pequeños productores de la zona seca, quienes han perdido toda su cosecha.
“Con la cooperación de Cáritas de España estamos viendo qué podemos hacer por la gente que sufre”, señaló Alvarado.
La próxima semana
le haremos llegar al
presidente (Daniel) Ortega una carta, donde le
solicitaremos declare
estado de emergencia por la sequía”.
Sacerdote Uriel Vallejos, director nacional de Cáritas Nicaragua.
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