Cinco nicaragüenses, quienes fueron detenidos en flagrancia por el Servicio Nacional de Guardacostas de Costa Rica mientras pescaban ilegalmente el Pacífico norte de ese país, fueron sentenciados con una multa económica el pasado lunes 2 de noviembre por un tribunal de la ciudad de Liberia, provincia de Guanacaste.
Los nicaragüenses, quienes además se encontraban en condición migratoria irregular, son de apellidos Espinoza, Solís, Pizarro, Alegría y Cordero, quienes fueron sorprendidos por oficiales de la estación de Guardacostas de Puerto Mora, cantón de La Cruz, Guanacaste.
Los oficiales del Guardacostas efectuaban un patrullaje nocturno, en aguas cercanas a la comunidad de Cuajiniquil, La Cruz, el pasado 27 de octubre, cuando encontraron a dichos sujetos en plena faena de pesca, lo cual realizaban a bordo de una embarcación tipo panga de nombre Sonia Primero, con la matrícula nicaragüense 323.
Es por ello que los oficiales remitieron a los sospechosos a la orden de la Fiscalía de Flagrancia de Liberia, tras lo cual fueron juzgados por el Tribunal de Flagrancia de esa ciudad.
Ellos fueron sentenciados a la pena mínima por el delito de pesca ilegal, en perjuicio de los recursos naturales y la normativa de pesca y acuicultura, p al pago de un salario base, es decir 403.400 colones (un poco menos de 800 dólares).
Ello porque no contaban con los permisos respectivos de Incopesca (Instituto Costarricense de Pesca), Minae (Ministerio de Ambiente y Energía), ni de ninguna otra institución del Estado costarricense.
Además, el Tribunal dispuso que la lancha y el motor quedaran decomisados a favor del Estado y bajo custodia del Servicio de Guardacostas, mientras que los extranjeros fueron puestos a la orden de la Dirección General de Migración y Extranjería a fin de que fueran deportados.