Varias denuncias ha recibido la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH) de Estelí de familiares de detenidos en las celdas preventivas de la Policía de esta ciudad, donde se registró un motín carcelario.
Reina Isabel Salguera, una de las que permaneció fuera de las instalaciones de la Policía el pasado 2 de noviembre —cuando se registró el motín— y quien también recibió la enorme descarga de agua que lanzaron miembros de la Dirección General de Bomberos en contra de familiares, aseguró que no ha podido tener información de su sobrino.
Consideró inhumano que les impidieran la entrada de alimentos a los privados de libertad en represalia por la droga que supuestamente estaban introduciendo parientes de uno de los reos y dijo que las autoridades debieron enfocar las sanciones en contra de esas personas.
Salguera dijo que al siguiente día del motín llegó a las instalaciones de la Policía y señaló que “uno de los muchachos dijo: ‘Fuimos afectados por las bombas lacrimógenas, nos lanzaron agua y nos golpearon’”.
Erika Iglesias, representante de la ANPDH en Estelí, informó que están solicitando a la Policía la autorización para verificar la situación de los detenidos. La asesora legal dijo que es un derecho de los reos el respeto de su integridad física y la alimentación, por lo cual desean constatar que se les estén respetando, pero enfrentan obstáculos al igual que en el Sistema Penitenciario.