A partir de este viernes 27 de noviembre la delegación policial de Río San Juan, en una acción articulada con el poder judicial, Ministerio Público y Gobernación, inició un proceso de traslado de los primeros diez reos al Sistema Penitenciario de Cuisalá, después que se produjera un motín en la celdas preventivas de San Carlos.
Los privados de libertad destruyeron puertas y se apostaron en el pasillo para demandar mejor alimentación, las visitas de sus familiares cuatro veces a la semana, que se lleve a los enfermos al centro de salud y el mejoramiento de la condiciones carcelarias.
El motín fue controlado tras escuchar la jefatura las demandas de los reos y comprometerse a atender las necesidades reales, pero los agentes policiales debieron apoyarse del Ejército para resguardar el orden.
Según fuentes gubernamentales, las celdas preventivas de San Carlos están hacinadas, pues guardan prisión 198 reos, cuando su capacidad es para albergar 50 privados de libertad.
El comisionado mayor Noel Cruz, jefe de la delegación policial de Río San Juan, reconoció la sobrepoblación penal en las celdas preventivas, por lo que están trasladando a diez reos al penal de Cuisalá, y continuarán en un proceso de descongestionamiento, mientras aseguró que es constante el esfuerzo que realizan para mejorar la alimentación y la atención de salud, inclusive llevando a los médicos a las celdas.