Dedicación y esfuerzo. Estas palabras bien pueden definir a Katherine y Greydin Suárez Castro, gemelas de 16 años y que dentro de unos días serán, además, bachilleres en Ciencias y Letras.
Hijas de un albañil y una ama de casa, ambas jóvenes de Nueva Guinea, en el Caribe Sur, han cursado todos sus estudios en el Colegio Montessori Jan Amos Comenios, ubicado en el casco urbano del municipio.
Una de ellas, Greydin, actualmente es la subcampeona de las olimpiadas matemáticas departamentales que organiza el Ministerio de Educación y es la campeona municipal.
Para aprovechar sus habilidad con las Matemáticas Greydin piensa estudiar Ingeniería Civil, mientras que su hermana Katherine se decanta más bien por la Ingeniería en Sistemas.
EN BUSCA DE UNA VIDA MEJOR
Sobre la experiencia de ser mujeres y estudiantes en una zona tan alejada y pobre del país, Katherine aseguró que “estudiar es difícil, el tema económico sobre todo, habemos muchos que no tenemos la facilidad, hay muchas facilidades en otros lugares, pero uno ha logrado hasta este momento salir adelante, con ayuda de los maestros y la familia”.
Para ambas, el apoyo de la escuela ha sido importante. “Han estado siempre pendientes de nosotras, incluso la escuela tiene un hermanamiento en Bélgica y con eso nos brindan ayuda económica para lidiar con nuestros gastos de la mensualidad”, detalló Greydin.
Para 2016, ambas esperan entrar a la universidad en Juigalpa, Chontales, y continuar en su camino académico para culminar esa nueva meta.
Los sueños de estas dos chavalas no terminan con alcanzar un título universitario. Ambas aspiran a encontrar espacio en el ambiente laboral y desarrollarse profesionalmente.
Mientras Katherine desea tener su propio negocio “y así poder administrarlo yo misma”, Greydin quiere “desempeñar la carrera en alguna empresa, quizás”.
Para ambas, conquistar el bachillerato teniendo en cuenta sus condiciones económicas ha sido resultado del esfuerzo. “Es importante tener unas buenas notas para que las personas vean el interés que uno le pone a los estudios, la dedicación, el esfuerzo y el interés que tenemos de salir adelante”, dijo Katherine, mientras su hermana asentía y compartían una mirada cómplice.
SIN DEJAR SUS RAÍCES
Katherine y Greydin Suárez Castro quieren para sí mismas “tener un mejor futuro”, aunque esto signifique años de trabajo. Estas bachilleras sueñan con terminar una carrera universitaria y volver a su natal Nueva Guinea para desarrollarse profesionalmente, aunque no descartan explorar en otros lugares si la oportunidad se presenta.
“Sabemos que ahora tenemos que buscar cómo valernos de nosotras mismas, uno tiene que buscar trabajo, pero a veces es difícil, así que también pensamos en tener nuestro propio negocio”, afirmó Katherine.
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