La fiesta mariana más importante del pueblo granadino comenzó ayer 28 de noviembre con la tradicional bajada de la imagen de la Inmaculada Concepción de María, después de la misa solemne y el rezo del Santo Rosario.
En homenaje a este día, que da inicio al novenario a “La Conchita”, la municipalidad ofreció un concierto a las 3:00 de la tarde con un coro originario de Masaya. Luego la banda musical del Ejército de Nicaragua dedicó una jornada musical a la Virgen. Como es tradicional en horas de la tarde y en la noche, tras la procesión, la Camerata Bach realizó una presentación en la Plaza Independencia, que culminó con los juegos de pólvora china.
La Iglesia católica invitó al pueblo a mantenerse en oración durante estos nueve días y a participar con devoción en las procesiones y prédicas que se realizan en cada barrio donde el pueblo devoto elabora costosas y bellas carrozas en saludo a María. La catedral Inmaculada
Concepción se vio colmada de feligreses desde horas tempranas, lo que evidencia la fe en la Virgen María.
SE CIERRA CON LA GRITERÍA
En el último día del rezo, cada 7 de diciembre, la Purísima abandona su carácter privado, pues las familias sacan sus imágenes de la Concepción de María a las calles, donde decenas de miles de peregrinos ofrecen sus cantos y reciben sus “gorras” en todos los departamentos del país.
La religión católica considera a Nicaragua como “hijo de María”, pues la Virgen de la Concepción es la más adorada por sus pobladores.
De acuerdo con datos oficiales, un 58 por ciento de los 6 millones de habitantes de Nicaragua profesan la fe católica.
