Nuevamente el Telica entró en actividad. Desde las 6:00 de la mañana de ayer y por más de diez horas unas setenta comunidades fueron afectadas por la expulsión de ceniza del volcán, principalmente Posoltega, Chichigalpa, Telica, Quezalguaque e incluso los alrededores de Poneloya.
El tramo de carretera de Telica, Quezalguaque y Posoltega quedó cubierto por una nube de ceniza y en sus casas los pobladores taparon el agua y los alimentos y empezaron a usar mascarillas.
Ana García, de 26 años, del reparto Verónica Lacayo, aseguró que es la primera vez que el volcán lanza “bastante” ceniza. “Nunca se había visto esto, es terrible la cantidad de ceniza que nos cae día y noche”, dijo García.
Nelson Álvarez, de 33 años, habitante del municipio de Telica, expresó que la gran cantidad de ceniza ha afectado a los niños, quienes tienen que andar con mascarillas. “Los animales también están sufriendo”, dijo.
Según los habitantes de la comunidad de Agua Fría, ubicada a novecientos metros del cráter del volcán Telica, es la primera vez que el coloso lanza piedras que llegan a caer a sus viviendas.
Las autoridades del Ineter aseguran que las explosiones pueden continuar en cualquier momento, por lo que recomiendan a la población no acercarse al cráter y estar atenta a las recomendaciones que brinden las autoridades.
1529 es el año de la peor erupción del Telica, cuando además de gases y ceniza expulsó lava. Desde entonces ha erupcionado muchas veces, pero con ceniza, gases y piedras incandescentes.
