El Movimiento por Nicaragua (MpN) organizó un foro en Managua para discutir el tema de la unidad.
El foro también será replicado en otros departamentos del país según Violeta Granera, directora ejecutiva del MpN.
Los expositores en el foro fueron miembros de partidos políticos y de la sociedad civil.
Uno de los invitados fue el editor en jefe de LA PRENSA, Eduardo Enríquez.
Enríquez dijo que cada elección es diferente y que por ejemplo, en las presidenciales de 1996 participaron 24 partidos políticos, resultando vencedor el Partido Liberal Constitucionalista (PLC).
“Veinticuatro partidos políticos. ¿A dónde está la unidad?”, preguntó Enríquez a los participantes del encuentro para reafirmar la importancia por elecciones libres y transparentes.
Enríquez explicó que más necesaria que la unidad de los partidos políticos es la unidad en torno a una propuesta que conquiste la imaginación y la esperanza de los ciudadanos.
“La gente se identifica con un partido, con un líder; sea por el carisma, sea porque habla su lenguaje, sea porque le está llegando con el mensaje y decide que va a votar por él. Y aunque tenga 24 opciones, incluso mejores que (Arnoldo) Alemán, la gente sabía lo que quería y Alemán lo interpretó bien y consiguió el voto”, dijo Enríquez, “otra cosa es que después traicionó esa promesas”, argumentó.
Este planteamiento fue parte de una dinámica que intentaba desmitificar la aclamada unidad de los partidos opositores al régimen actual.
Lea: Piden unidad por separado
DIÁLOGO Y REFLEXIÓN
Al encuentro fueron invitados como expositores a parte de Enríquez, el jurista Gabriel Álvarez y la presidenta del Movimiento Renovador Sandinista (MRS), Ana Margarita Vijil.
Finalmente en el encuentro se valoró que la búsqueda de la unidad y sus reiterados fracasos solo ha servido para dividir el voto de los ciudadanos y en consecuencia ha sido un beneficio para el partido gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
También se mencionó que en 1990 participaron 10 partidos, pero en un contexto social, político y económico muy diferente.