El diario estadounidense El Nuevo Herald publicó ayer una investigación en la que sostiene que el alto mando militar de Venezuela se rehusó a participar en un fraude electoral masivo el pasado domingo.
Según la publicación, “la derrota electoral sufrida el domingo por el régimen de Nicolás Maduro, que sentó los cimientos de un verdadero proceso de cambio en el país, se produjo luego que la máxima cúpula del chavismo perdiera el respaldo incondicional del alto mando militar que terminó rehusándose a participar en lo que hubiese sido un fraude masivo”.
“Fuentes cercanas a la situación explicaron que el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, se rehusó a colaborar con las intenciones de Maduro y del presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, de desconocer la masiva victoria de la oposición, lo que hubiera gestado un peligroso escenario de violencia”, escribió el periodista Antonio María Delgado, de El Nuevo Herald.
Según las fuentes del diario, Padrino insistió ante Cabello y Maduro que las Fuerzas Armadas venezolanas solo respetarían un anuncio que reflejara el resultado recogido en las urnas de votación, decisión que terminó obligando al chavismo a reconocer la victoria de la oposición”.
Según una fuente anónima citada por El Nuevo Herald, “Padrino López asumió un gran riesgo, se la jugó para preservar la institucionalidad”.
“Otra de las fuentes dijo: ‘no quería convertirse en el responsable de las muertes que podrían producirse’ como resultado de lo que el régimen, en su desesperación, estaba preparando para ejecutar”, sostiene El Nuevo Herald.
La investigación de Delgado señala también que “la posibilidad de modificar el resultado fue discutida a inicios de la semana pasada en una reunión sostenida en el Fuerte Tiuna (…) en la que participó la máxima cúpula del régimen, el alto mando militar, los organismos de inteligencia y al menos un representante del gobierno cubano, según un reporte sobre el encuentro obtenido por el Nuevo Herald”.