Quizás uno de los aniversarios más celebrados en el 2015 sea el Centenario de La Metamorfosis de Franz Kafka, el autor checo más conocido del siglo XX y uno de los iconos turísticos de su Praga natal. Apareció publicado en alemán, el idioma en el que escribía Kafka, en la revista Die weissen Blatter (“Las hojas blancas”) de Leipzig, en Alemania. La primera edición en formato del libro tiene fecha de diciembre de ese mismo año, en la editorial alemana Kurt Wolff.
La Metamorfosis es el sobrecogedor relato de Gregor Samsa, un viajante de negocios que una mañana se despierta transformado en un gigante y feo escarabajo.
Los estudiosos de Kafka han interpretado esta transformación como una metáfora sobre el peso insoportable de la responsabilidad. Con el tiempo, esta breve obra de 72 páginas, escrita por Kafka, refleja de alguna forma la experiencia vital del autor.
Kafka con una vida trágica, nació en Praga en 1883 y murió de tuberculosis justo un mes antes de cumplir los 41, trabajó en una empresa de seguros y dejó una obra publicada muy corta y una obra póstuma más extensa, que pidió que fuera destruida pero que se salvó y acabó editándose.