La solución a la crisis humanitaria de los cubanos en el Sistema de Integración Centroamericana (SICA) no contó con Nicaragua porque el gobierno de Daniel Ortega no fue invitado, según el arzobispo de Managua, el cardenal Leopoldo Brenes.
Aunque el Gobierno no se ha pronunciado hasta ahora, Brenes dijo: “Yo me di cuenta que en la última reunión no se invitó a Nicaragua para los acuerdos, solo asistieron aquellos países que habían tenido una intervención para buscar una solución”.
Según el cardenal, la crisis humanitaria de los migrantes cubano es más compleja de lo que se cree, porque según información que conoció en Costa Rica, durante una reunión regional de obispos, existen más de cuarenta mil cubanos varados en Ecuador, todos buscando llegar a Estados Unidos por el corredor centroamericano y México.
“Este pequeño conflicto que tiene Costa Rica es un pequeño punto. ¿Los países estarán preparados para recibir a esos cuarenta mil?”, se preguntó Brenes.
El tránsito de los migrantes cubanos se volvió crítico el 15 de noviembre pasado, cuando Nicaragua le impidió por la fuerza ingresar al país a casi dos mil de estos.