Vecinos de la comarca La Tejana, sector oeste de la ciudad de Chinandega y sur de El Viejo viven momentos tristes por la “negrura“, que están envueltos con la polvareda que se levanta desde grandes extensiones de tierra preparados para cultivos de cañaverales.
Este 9 de febrero a las nueve de la mañana se suspendieron las clases en el centro escolar San Jorge, de la localidad, debido a que llegaron pocos estudiantes y la mayoría de los 160 de primaria y preescolar no son enviados por los padres de familia.
“Ahora que llegamos a la escuela no pudimos dar clases porque no se aguanta la polvareda. Los políticos de la comarca fueron a conversar con dueños de terrenos pero no hay repuesta”, declaró el profesor Ramón Trejos.
La profesora Lilieth Gago, con sus ropas y toalla cargadas de polvo, dijo que los niños no lograban concentrarse, casi se asfixiaban, les atacó gran picazón que a muchos hizo llorar por lo que decidieron llamar a los padres.
Por su parte la maestra Estrella Zeledón indicó que la polvareda con químicos es el que sofoca a los niños, situación por la que temen puedan enfermar de los pulmones.
PADRES Y NIÑOS MIGRAN
Una delegación del Ministerio de Educación arribó al lugar al mediodía para hablar con los padres pero estos preparaban el traslado de varios niños hacia otros sectores.
Silvia Sandoval, envuelta en trapos se protegía del polvo, dijo que las trastos de la cocina, las ollas del agua, los alimentos, las camas, y los roperos estaban envueltos de tierra que penetra con los vientos hasta en horas de la noche.
“Los niños están enfermos con tos y picazón”, señaló la muchacha.
Carmen Ramos, dueña de una pulpería refirió que cerró la venta por la polvareda y en su casa no han cocinado, sobreviven con el consumo de queso, en las últimas horas.
“Una nieta tuve que sacarla porque padece de asma, esto esta terrible”, mencionó la señora.
PELIGRO DE AGRESIONES
Juan Francisco Jirón Montano, señaló que el fin de semana un grupo protestó a los dueños de los terrenos y hubo que intervenir entre los jóvenes para evitar un derramamiento de sangre.
La tarde de ayer hubo reportes de adolescentes con vómitos por la absorción del químico que aplican en la preparación de tierra el cual levanta el polvo y lo esparce en la comunidad con rumbo sur.