Monseñor Rolando Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa, expresó este domingo en el Día Internacional del Trabajo que el desempleo y la brecha entre ricos y pobres es flagelante en Nicaragua.
“Aunque la empresa privada y el sector público afirman que el empleo formal ha crecido en Nicaragua, la tasa de desempleo, de subempleo y de empleos sin remuneración, es flagelante. La brecha entre ricos y pobres sigue aumentando”, lamentó Álvarez, en una homilía en la parroquia San José Obrero, en La Dalia, Matagalpa.
Álvarez volvió a criticar la falta de institucionalidad en Nicaragua, asegurando que esto afecta a todo el sistema democrático de la nación.
“La falta de institucionalidad está acabando con el sistema democrático en el país”, señaló el miembro de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN).
“Pensamos que la falta de cambio de autoridades electorales anuncia elecciones como otras que ya se han vivido: viciadas e irregulares, con resultados muy predecibles”, criticó Álvarez.
“Pidamos a San José Obrero que interceda por todos los nicaragüenses, para que en un acto de sensatez unamos sinceros esfuerzos para hacer de Nicaragua un auténtico estado democrático y una auténtica república soberana”, exhortó el prelado.
El obispo Álvarez también aseguró que la oposición política en Nicaragua está desarticulada y dividida y que solo piensa en cuotas de poder. “Una oposición desarticulada, dividida y en la que a sabiendas que sin ninguna posibilidad de llegar a gobernar el país buscan cuotas de poder para seguir negociando”, dijo el jerarca católico al criticar la gestión de los políticos opositores.
El obispo Rolando Álvarez señala que los pactos y los intereses personales son ya una costumbre de hacer política en Nicaragua. “Reinan los intereses personales. Los caudillos siguen prevaleciendo en la política criolla. No se le da lugar a rostros nuevos con ideas nuevas”, fustigó el obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez.