Evitar que los ciudadanos, menores de 18 años, tengan acceso a productos de tabaco y disminuir el casi medio millón de muertes que provoca anualmente el consumo de estos productos, son los principales objetivos de la nueva regulación que la Administración de Drogas y Alimentos (FDA, en inglés) aplicará en Estados Unidos a partir del próximo 6 de agosto a fabricantes, importadores y distribuidores de productos relacionados al tabaco.
La semana pasada al darse a conocer la emisión de estas nuevas normas el asesor presidencial para asuntos económicos, Bayardo Arce, dijo que ese país le estaba dando “un mazazo” a Nicaragua.
“Nos están castigando por producir el mejor puro del mundo más barato que en otros países”, aseguró Arce.
Además advirtió que la medida provocará desempleo en el sector. “Parece que quieren invitar a miles de trabajadores de este sector agroindustrial a que migren a Estados Unidos a buscar el sueño americano, porque no los dejan concebir su propio sueño con el trabajo honrado y creativo en su propio país”, sostuvo el funcionario.
Pero el consejero económico de la Embajada de Estados Unidos en Managua, William G. Muntean, mantiene que “Nicaragua va a tener la misma oportunidad de otros países, incluso Estados Unidos para vender sus productos (puros) y que “el Gobierno de Estados Unidos está muy consciente de la posición del Gobierno de Nicaragua y del sector privado”, porque durante la consulta de las nuevas reglas recibieron mucha información de parte de ellos. Nicaragua y el resto de países, que elaboran puros hechos a mano, cabildearon para que estos fueran excluidos de esta normativa.
Sin embargo, el funcionario sostiene que “basado en evidencia científica” el FDA “concluyó que no existe ninguna justificación apropiada para excluir a los puros premium del alcance de esta regulación” porque “todos los productos de tabaco representan graves riesgos para la salud”.
LAS NUEVAS NORMAS
Según Muntean, “el tabaco es una amenaza significativa para la salud pública en Estados Unidos y es la principal causa tanto de enfermedades prevenibles, como de muertes”.
A su consumo se le atribuyen unas 480,000 muertes cada año en ese país. Entonces esta ley, que se aprobó en 2009, le permite al FDA mejorar la salud pública y proteger a las futuras generaciones de los riesgos del uso del tabaco.
Entre las medidas más importantes para la comercialización se incluye la prohibición de vender cigarros, tabaco de pipa y puros a menores de 18 años y entregar muestras gratis de estos productos. También, los puros tendrán que incluir en su etiqueta y sus anuncios la advertencia del daño que causa su uso.
Las empresas deberán registrarse y demostrar que sus productos cumplen con los estándares de salud pública y reportar la lista de ingredientes nocivos y potencialmente nocivos “y no se podrá vender productos de tabaco modificado a menos que sean autorizados”, detalló Muntean y añadió que los fabricantes “podrán seguir vendiendo sus productos durante un plazo de dos años mientras someten la información”.
La nueva regulación es un documento de más de 400 páginas que está bajo revisión de la Asociación Nicaragüense de Tabacaleros.
Los mejores productos del mundo no necesitan distribuir gratis”.
William G. Muntean, consejero económico de la Embajada
de Estados Unidos en Managua.