Unos 20,600 pequeños caficultores de las zonas más pobres de Centroamérica recibirán herramientas de trabajo, insumos, asistencia técnica, financiamiento y acceso a tecnologías.Además podrán establecer sistemas de alerta y vigilancia para monitorear la evolución de las condiciones en las que desarrollan su producción.
Estos beneficios serán otorgados a través del Programa piloto para atender a la población pobre afectada por las plagas del café y la promoción de prácticas para la caficultura sostenible en la región de Centroamérica, que invertirá 3.5 millones de dólares en fondos no reembolsables para proporcionar asistencia técnica a los 20,600 pequeños caficultores.
El objetivo es apoyar el proceso de reactivación de la capacidad productiva de familias de escasos recursos que dependen directamente de la caficultura, informó el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) a través de un comunicado.
“El programa cuenta con dos componentes: el financiero, destinado a actividades de renovación y mantenimiento de fincas cafetaleras, así como inversión para la modernización al sector agrícola por medio del fortalecimiento de los sistemas productivos; y un segundo componente de asistencia técnica para la implementación de buenas prácticas para la promoción de una caficultura sostenible”, detalló Nick Rischbieth, presidente ejecutivo del BCIE.
El Banco firmó un convenio de cooperación con el Gobierno de Taiwán por 3.5 millones de dólares en el marco de este programa. “Confiamos en que esta herramienta contribuirá a la modernización del sector agrícola, a través de la implementación por parte de las secretarías, ministerios de ganadería y agricultura e institutos del café de la región”, dijo el embajador de Taiwán en Honduras, Joseph Kuo.