“¡Justicia! ¡Justicia para Xiomara! ¡Ni una muerta más! ¡Pena máxima para el asesino!”, eran parte de las frases que gritaron familiares y amigos de la joven Xiomara Cruz Torres, de 23 años, asesinada en la ciudad de Estelí.
Los estelianos iniciaron el recorrido a las 4:30 p.m. de este domingo, en la ciudad de Estelí, desde el parque hasta la Policía. Antes pasaron por la casa donde vivía Rodolfo García Valenzuela, alias “El Popo”, acusado de —presuntamente— asesinar a Cruz Torres, quien estuvo desaparecida desde el pasado 8 de abril.
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El 27 de mayo fue desenterrado el cuerpo de la joven que estaba en el patio de la casa de García, a quien familiares de la víctima señalaron siempre de ser la persona con la que Cruz Torres iría a reunirse.
A pesar de que él siempre negó haberse reunido con la víctima, fue hasta que lo detuvo la Policía que confesó lo que hizo.
Jackeline Cruz Torres, hermana de Xiomara, dijo durante la marcha que estaban inconformes con las actuaciones de la Policía durante el proceso de investigación.
Según Jackeline, los agentes les ocultaron información, además de que piensan que hay más involucrados.
“Nosotras las mujeres tenemos derecho a ser libres, a expresarnos y a vestirnos de la manera que queramos”, expresó Marisol Gadea, quien se enteró de la marcha a través del grupo formado en las redes sociales para encontrar a Xiomara.
DENUNCIA EN ASUNTOS INTERNOS
El asesor legal del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) de Estelí, Alberto Rosales, informó que existe queja de parte de la familia de Cruz Torres en la oficina de Asuntos Internos de la Policía Nacional, por supuesta negligencia de la Policía de Estelí.
Entre las debilidades expuestas por la familia, según Rosales, está que la Policía de Estelí minimizó el caso, pensando que Cruz Torres se encontraba por ahí, a pesar de que la misma familia insistía en que pudo haber sido secuestrada o sacada fuera del país.
El relato de los familiares de Cruz Torres indica que ellos mismos consiguieron el historial de llamadas de la joven y se lo entregaron a la Policía que debió hacer ese trabajo.
“Otros de los graves problemas en este caso fue la falta de información a la familia”, expresó Rosales, quien inclusive expresó que no fueron notificados de la audiencia preliminar contra García el pasado sábado.
“Esperemos que no sea como en reiteradas ocasiones que se han interpuesto denuncias en contra de oficiales de la Policía y no hay resultado. Últimamente la especialidad de Asuntos Internos se ha vuelto una instancia receptora de quejas, pero que no está resolviendo”, expresó Rosales.
Enrique Vanegas, uno de los que participó en la marcha, manifestó que la Policía dejó ir a García a pesar de que este andaba herida la mano derecha y otras señales de violencia.
En horas de la noche del sábado, llegaron personas desconocidas a la casa propiedad de doña Leonor Valenzuela, de 74 años, madre de García Valenzuela, donde pintaron frases calificando de asesino al sospechoso y lanzaron pintura roja también en la puerta principal de la vivienda.
Por su parte, Rosales hizo un llamado a la cordura y pidió a todos manifestarse pacíficamente, pero también instó a las autoridades a no cerrarles las puertas a los familiares de la joven —quienes tienen sed de justicia— para evitar que estos hagan justicia por sus manos.