Desde el interior de las celdas preventivas de la Policía de León, varios reos vía telefónica han manifestado a sus familiares las malas condiciones carcelarias en que se encuentran, confiaron estos últimos a LA PRENSA.
Familiares de reos que hablaron bajo condición de anonimato, insistieron en la necesidad de que construyan el Sistema Penitenciario en la ciudad, para evitar amotinamientos.
En reiteradas ocasiones el gobierno ha anunciado la construcción de un nuevo Sistema Penitenciario en Occidente, pero actualmente solo está el terreno ubicado a siete kilómetros de la ciudad, sobre la Carretera León-Managua.
Según estadísticas de la Policía de León, las celdas están capacitadas para albergar a 110 reos y en estos momentos hay más de 520 privados de libertad.
El noventa por ciento ya fue condenado y deberían estar en el Sistema Penitenciario de Chinandega. La mayoría de reos paga condena de 15 a 30 años de cárcel.
Se conoció extraoficialmente que después del amotinamiento del jueves 16 de junio en la Policía de León, fueron trasladados al Sistema Penitenciario 32 condenados.
El amotinamiento dejó como resultado nueve heridos, entre ellos, el jefe departamental de la institución, comisionado general Luis Barrantes.
SUPUESTAS CAUSAS DEL AMOTINAMIENTO
El amotinamiento se originó supuestamente por varias razones: mala alimentación, maltrato por parte de los oficiales, falta de atención médica y hacinamiento en las celdas.
Fuentes vinculadas a la Policía Nacional recordaron que desde los años noventa hasta hace tres años, la frecuencia de muertes en las celdas era uno cada cinco años. En la actualidad, la frecuencia es de más de dos cada año y esto se atribuye a que hay más población penal.
Según las fuentes, “nadie da repuesta, mientras los reos condenados y en prisión preventiva que deberían estar por ley en el Sistema Penitenciario, siguen guardando prisión en las celdas de la Policía Nacional, donde no hay condiciones de régimen carcelario y reeducativo que por ley se establece para los reos condenados”.
FALTA DE RECURSOS
Agregan las fuentes que las cárceles de la Policía no están dotadas ni de recursos humanos capacitados para el manejo de reos condenados, ni de recursos técnicos y materiales para asistir a los privados de libertad.
“No hay clínicas para atender a los privados que requieran de asistencia médica, no hay presupuesto para alimentación, no hay presupuesto para mantenimiento y limpieza de las celdas, hoy convertidas en penales con más de quinientos reos”, resaltó otra de las fuentes policiales.
RECLAMOS DE REOS
El hacinamiento ha generado malestar entre los detenidos que están condenados y que reclaman sus condiciones básicas, como las visitas conyugales, la alimentación, la asistencia médica y las horas de sol o patio.
“Otros de los problemas todos los días es que los reos fingen síntomas de enfermedades para ser tratados fuera de las celdas y así lograr una evasión de la pena. También provocan daños al sistema de drenaje y abastecimiento de agua potable, con fines de provocar el caos”, enfatizó la fuente policial.
