Desde que una falsa doctora robó a un recién nacido del Hospital Alemán Nicaragüense, las mujeres embarazadas y las que ya dieron a luz, asisten al lugar con el miedo de que se repita la historia y que esta vez sea una de ellas la que pierda a su bebé y que las autoridades no logren recuperarlo.
Así transcurren los días en este centro hospitalario público de Managua, donde el pasado 1 de junio —Día del Niño— a Marianela Flores Maldonado le quitaron a su hijo, tan solo 12 horas después de haberlo parido.
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Una mujer que se convirtió en madre a mediados de mayo, pero que logró salir con su hijo casi un mes después por complicaciones de salud, recordó el momento cuando la noticia se regó por todo el hospital. A partir de ese momento no logró estar tranquila por miedo a que le pasara lo mismo.
“Recuerdo que una vez me dijeron que me lo iban a revisar en la Sala de Neonato pero yo dije que no, que no aceptaba. Todo era por miedo a que me lo robaran”, reconoció la madre, quien solicitó anonimato.
Algo similar le ocurrió a otra madre, que era primeriza. Ella llegó con los dolores de parto cinco días después del robo del bebé, exactamente el 6 de junio, y luego de dar a luz pasó angustiada por su hijo. “A mi marido no lo dejaban entrar, y como somos solo los dos no tenía a nadie más que me auxiliara. Estuve tranquila hasta que me lo dieron de alta”, manifestó.
VIGILANCIA MÁS ACTIVA EN EL HOSPITAL
Personas que asisten constantemente al Alemán Nicaragüense, sea por pasar consulta o visitar a un enfermo, coincidieron en que a raíz del robo del bebé, los vigilantes y porteros están más atentos a quiénes entran y salen.
“Antes era fácil entrar al hospital, no te preguntaban tanto adónde ibas, pero ahora sí. Cuando es hora de visita hasta te piden la cédula y te anotan”, comentó Jennifer González, embarazada que ayer asistió al hospital.
“Todos vinimos a pasar consulta pero para tener bebé uno no se siente seguro porque la seguridad ya no está, sino que hay un temor siempre, ya quedó ese temor… tiene que haber un familiar de la paciente para ser CPF de la persona que está ahí”, aclaró Margarita Salinas, originaria del municipio de Tipitapa.
Una sobrina de Salinas tuvo su primer hijo en ese hospital hace ocho años y nadie tuvo miedo de que se lo robaran. Si otra familiar de ella llegara —dijo— ahora sí tendrían miedo.
“Cuando ella tuvo a su bebé yo estuve ahí para ayudarle, porque era la primera vez; ahora estaría por miedo a que desaparezca, todo mundo quedó con miedo luego del robo”, finalizó González.
HERMETISMO CON EL ROBO DEL BEBÉ
Las autoridades de la Policía Nacional y del Ministerio de Salud han sido herméticas con el caso del robo del bebé en el Hospital Alemán Nicaragüense.
A 24 días del robo, los familiares del niño perdido dijeron que la Policía ya ni les quieren contestar el teléfono.
Los padres de familia llegaron esta semana al Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) a solicitar acompañamiento en el caso porque ven que no prosperan las investigaciones.