Cada vez son más los colegios que incorporan en sus aulas juegos de respiración, convencidos de que generan múltiples beneficios como la disminución del estrés muscular y mental y el aumento de la confianza.
La psicóloga y especialista en Logopedia, Silvia Álava, insiste en la importancia de que los ejercicios de respiración se hagan bien, y en que la expiración dure más tiempo que la inspiración.
Apunta que se trata de una técnica muy fácil de aprender y muy recomendable para todos los niños, y especialmente para los más nerviosos o con problemas de ansiedad.
De la misma opinión es la escritora Inés Castel-Branco, autora del libro Respira, el acto más sencillo y necesario que todos hacemos, pero que muchas veces hacemos mal.
Castel-Branco recomienda hinchar globos, porque crea la necesidad de una respiración profunda para volver a soplar fuerte, lo que aumenta la capacidad pulmonar, o lanzar un cohete. En esta respiración el niño imagina que es un cohete que se está preparando par ir a la luna y deberá estirar lentamente los brazos hacia arriba lo que ayuda a dilatar la caja torácica. La pausa que hace arriba reteniendo el aire calma el ritmo respiratorio e induce a la serenidad.