La bahía de Corinto, puerto El Toro, los farallones en la Península de Cosigüina, en el municipio de El Viejo, las rocas que lanzó el volcán Cosigüina al golfo en la erupción del 20 de enero de 1835, además de los pintorescos pueblos fronterizos del norte de Chinandega son sitios vírgenes para el turismo que se mueve en el país.
Luis Vanegas, representante de Pinolero Tours, confirmó el maravilloso potencial en el departamento de Chinandega, pero que aún se trabaja en el tema de la promoción y señala como caso concreto el proyecto de la Ruta Colonial y de Los Volcanes, que creó material publicitario en inglés y español, se entrenó a guías, se cumplió con asistencia técnica y se proveyó insumos para mejorar el nivel de servicio al cliente, muestra del trabajo de la empresa privada con el Gobierno y la cooperación externa.
Vanegas resume que la empresa privada; hoteleros, restaurantes y las cuatro turoperadoras, deben unirse para promover los servicios y una de las sugerencias es elaborar los mapas locales, como lo hacen en Matagalpa, León, Granada y San Juan del Sur.
“El turista anda buscando una actividad agradable, pero que no sea de alto costo y por ahí falta mejorar la parte de infraestructura y no solo el Gobierno, que le corresponde reparar las carreteras, sino del empresario local invertir en lanchas apropiadas para realizar los viajes”, mencionó el promotor turístico.
Vanegas dice respecto a la bella bahía de Corinto, que no solamente es la parte natural, sino la historia que ahí se guarda, además de la gastronomía propia del mar, lo que ahora se desaprovecha.
En Corinto se realiza el turismo de celebraciones con peregrinaciones dedicadas a la Virgen del Carmen el 16 de julio y en noviembre a Nuestra Señora del Trono, recordando su arribo desde España, fechas en las que se acercan visitantes nacionales y extranjeros.
EL NORTE PINTORESCO
Cosigüina y su laguna verde azulada es una de las bellezas naturales apetecidas por los turistas europeos, canadienses y norteamericanos.
Otro de los destinos es de recorridos en kayak, en el sector costero Los Zorros, Jiquilillo, El Viejo, que manejan cuatro guías locales debidamente entrenados.
Escasas veces los visitantes extranjeros solicitan traslados a la Casa Hacienda San Pedro, en el municipio de Villanueva, o a los cuatro “pueblos santos”: San Juan de Cinco Pinos, Santo Tomás del Nance, San Pedro de Potrero Grande y San Francisco de Cuajiniquilapa, comunidades pintorescas, de producción de granos básicos, artesanías y casas de taquezal y adobe que se divisan a lo lejos entre los cerros y a orillas del camino.
BELLEZA EXUBERANTE
El español Florencio González, que ha invertido en un restaurante y el Hotel Valencia, a orillas del extenso puente de Paso Caballos, confirmó que tiene en sus planes ofrecer recorridos en cayucos para avistamiento del manglar y aves.
Además en las aguas tranquilas del sector apreciar la panorámica que ofrece la cordillera Los Maribios, el Estero de Santa Paula, en El Realejo, y el cementerio de la Isla Guerrero, de Corinto.
Antonio Ramos es líder de un mil pescadores en la Península de Cosigüina-El Viejo e indica que en lancha durante las faenas advierten durante el día las variadas bellezas exuberantes que posee la región, las que esperan por una intensa promoción, infraestructura y que representantes turísticos oferten viajes por la zona y de alguna manera abaratar los costos.
