Pese a que desde 1990 a la fecha la Policía registra la muerte de más de 260 agentes ocurridas en diferentes circunstancias, con la muerte del jefe de la Policía de la delegación de Boaco, comisionado mayor Buenaventura Miranda Fitoria, ocurrida la noche del miércoles 27 de julio, esa institución ha perdido en los últimos 14 años al menos 12 de sus miembros en cinco hechos sangrientos.
Uno de esos hechos ocurrió el 13 de mayo de 2002 en plena vía pública de la capital. La víctima fue el entonces inspector general de la Policía y ahora primer comisionado in memorian, Christian Munguía Alvarado, asesinado de un balazo en el cuello por dos asaltantes que lo atacaron a tempranas horas del día en el Barrio “Rigoberto López Pérez”, cuando se desplazaba en su vehículo.
Dos años después, el 4 de mayo de 2004 la matanza de cuatro policías en la delegación de Bluefields, conmocionó al país. Allí murieron Juan José Fúnez, Ruth González, Johnny Dometz Henry y Róger Ernesto Villachica.
En esa ocasión se relacionó el caso a venganza del crimen organizado contra la institución.
El 7 de julio de 2007 , también fue asesinado el comisionado Manuel Guillermo Obando, muerto de ocho estocadas cuyo cuerpo fue dejado abandonado en un predio montoso del kilómetro ocho y medio de la carretera nueva a León.
La víctima tenía atados los pies con unos cordones y las manos con una corbata. Todos esos elementos llevaron a la Policía a presumir que lo habían asesinado en su propia vivienda, donde los investigadores encontraron una prótesis dental del comisionado, su ropa y su calzado.
Tanto en el caso de Munguía como el de Obando la versión oficial indica que el móvil fue el robo pero estos casos no quedaron del todo claros.
El 15 de agosto de 2015 en una comarca del Polo de Desarrollo Daniel Guido, Punta Gorda, Caribe Sur, fueron asesinados los agentes Santos Andrés Sevilla Castro, Roberto Granados, Wilber González, Jorge González, y Wilbert López.
Sobre ese caso la Policía responsabilizó a la banda El Chofer, una agrupación delictiva dedicada al robo supuestamente en represalia por golpes que le propinó esa institución, pero una investigación realizada dos meses después por LA PRENSA, demostró que el grupo mencionado está vinculado a una agrupación de rearmados denominados Las Milpas.
En tanto, sobre el crimen contra Miranda ocurrido la noche del miércoles en Boaco, la Policía informó que todavía investiga el hecho. Según la vocera del Gobierno, Rosario Murillo, Miranda había regresado de Managua, adonde había asistido a una reunión de jefes policiales en Managua de donde regresaba, cuando fue ultimado a balazos frente a su casa.