Es placentero desear algo, ir a una casa comercial y tenerlo el mismo día, ¿verdad? Sin pago adelantado (prima), sin haber tenido que ahorrar por meses para obtenerlo… pero, ¿sabe realmente cuánto paga por ese crédito?
Casi siempre cuando los compradores visitan las tiendas de electrodomésticos se fijan solo en cuánto es lo que deben pagar mensual o quincenal y se dejan llevar por la cuota que más se ajuste a sus capacidades, sin reparar en el plazo y cantidad que pagarán por ese crédito.
Intereses: consulté la mayoría de las tiendas de electrodomésticos que los venden al crédito y encontré que la tasa de interés generalizada es de 4.5 por ciento mensual (54% al año). Contrario a lo que muchos pueden creer, es una tasa mayor a la de las tarjetas de crédito más caras (50% de interés anual en córdobas).
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Mayor plazo, más caro. Lógicamente si el crédito es por un tiempo más largo, deberá pagar más por ese producto y sumar cargos adicionales.
¿Cuánto más? Le doy una idea: coticé un televisor que se vende al contado a 10,000 córdobas (9,999 dicen en la tienda). Si no se da prima y se financia a 12 meses terminará pagando 17,232 córdobas. Si se financia a 18 meses pagará 20,448 córdobas; si optara por un plazo a 24 meses serían 23,952 córdobas y a 48 meses 40,128 córdobas. A 48 meses (4 años) habrá pagado el equivalente de cuatro televisores.
Sí, es un crédito bastante caro, pero recuerde que ahí no sólo está pagando por el producto, sino también por las personas que trabajan en esa tienda, la energía que consumen todos esos aparatos de muestra que pasan conectados todo el día, el aire acondicionado, etcétera, etcétera.
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¿Qué conviene más? Ahorrar para comprar ese bien. Muchas personas dirán que debe pasar mucho tiempo para ello, pero no necesariamente es así.
La cuota mensual para el crédito a un año era de 1,436 córdobas al mes. Si usted se dispusiera a ahorrar ese mismo monto, no tendría que esperar un año: al cabo de siete meses tendría la cantidad requerida.
¿Y si pago antes? En todas las tiendas consultadas dijeron que si se desea hacer cancelación anticipada, se pagará el saldo del principal hasta la fecha y se eliminan los intereses pendientes. Es decir, se revisa cuánto se ha abonado al capital y se paga la diferencia entre ese monto y el precio pactado en el contrato.
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Ojo: no le recomiendo ir pagando cuotas “más grandes”, pues si lo hace de ese modo lo único que hará es adelantar cuotas, pero sobre la base del mismo interés. Según el sondeo realizado, la única forma de ahorrarse intereses es cancelación total de la deuda.
Una vez cancele el crédito no olvide exigir el recibo de cancelación. Según el artículo 76 de la Ley 842 (Ley de Protección de los Derechos de las Personas Consumidoras y Usuarias) “una vez que la persona consumidora o usuaria cancele el crédito otorgado, la persona proveedora tendrá la obligación de entregarle dentro de un plazo de hasta cinco días hábiles el recibo de cancelación y los otros documentos en los cuales se formalizó el crédito respectivo firmado por la persona proveedora o su representante”.
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¿Cuándo sí usar este tipo de créditos? Solo recomiendo recurrir a comprar electrodomésticos al crédito cuando la circunstancia le obligue. Por ejemplo, se averió la cocina de su casa, no tiene reparación… y no tiene ahorros para comprarla de contado. En una casa se puede pasar meses sin un microondas, sin equipo de sonido, sin lavadora y hasta sin televisor, pero sin la cocina es muy, muy difícil (a menos que recurra a alternativas menos amigables con el ambiente).
En casos urgentes como ese puede recurrir a ese tipo de créditos pero procure ahorrar lo suficiente para hacer una cancelación anticipada pronto y así no pagar muchos intereses.
Recuerden que generalmente los productos que se ofrecen en ese tipo de comercios son meramente de consumo, no vitales para nuestra vida, por lo que debe repensar si vale la pena meter mano al crédito para ello. ¿Realmente no puede esperar un poco a que ahorre el monto requerido? Piénselo.
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