Una nueva industria toma fuerza entre los talleres artesanales en Managua, Masaya y Granada: las jugueterías.
Los productores han encontrado en la elaboración de juguetes tanto de madera como de barro o metal una opción para darle valor agregado a los residuos que quedan tras la elaboración de muebles finos, artesanías o estructuras.
Moisés Linares tiene 24 años y tres de dedicarse a la elaboración de coloridas piezas de madera en forma de caballitos o bien camiones que con frecuencia se venden en semáforos de gran afluencia en la capital.
“Hemos visto que está tomando más fuerza y que tenemos más encargos. La idea es poder tener nuevos diseños y un día exportar nuestro talento”, expresó Linares, tras participar en días recientes en una feria en un centro comercial en Managua.
Linares forma parte de los más de treinta talleres que en los tres departamentos en mención están dando rostro infantil a la madera, el barro y el metal.
“Trabajamos mucho color para que sea atractivo para los niños. Aunque son sus padres quienes los compran, pero primero llega a los ojos de los pequeños. Así que también hemos adaptado diseños de superhéroes o princesas para que les guste más a nuestra meta que son los niños y niñas”, expresó el artesano originario de Masaya.
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Juguetes hechos en #Nicaragua. Una industria que toma fuerza en el país. Lea este viernes @laprensa @LPActivos pic.twitter.com/TSAVpG2oTh
— Yohany López (@jonylopez14) 26 de agosto de 2016
IMPORTANTE PARA EL DESARROLLO
La experiencia que vive Linares de la mano del Grupo Raíces, organización que aglutina a más de 350 artesanos del Pacífico y centro norte del país, al darle valor agregado a la producción, en reiteradas ocasiones ha sido señalada como uno de los desafíos de las economías en desarrollo por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
De tal forma que esto se convierta en una de las opciones para el desarrollo inclusivo de industrias con potencial de crecimiento en países pobres de la región, indica el informe: América Latina y el Caribe y China, hacia una nueva era de cooperación económica, de la Cepal, donde plasma la relevancia que pueden tener en las exportaciones de un país.
María Cecilia Zambrana es propietaria del negocio de madera Mano Alternativa en Granada. Ella produce juguetes pequeños para niños, rompecabezas y cajas de colores en diferentes tamaños.
Cuenta que es un giro de negocio muy difícil porque compiten contra “la inyección extranjera de publicidad que atrapa la imaginación de los niños”.
Tanto Linares como Zambrana obtienen la materia prima a nivel local, que al mismo tiempo es su mercado natural al que llegan a través de las ferias a las que son invitados.
Zambrana ha recibido apoyo por parte de programas que ejecuta la Unión Europea en el país y así ha podido mejorar la presentación de sus productos. “No es tan fácil porque necesitás de maquinaria que sea especializada para los cortes, para los detalles y agilidad en la pintura, así como de espacios especiales para el secado de las pinturas y retoques”, expresó la emprendedora granadina.
LAS LIMITANTES
Ambos artesanos coinciden en que el acceso a financiamiento es uno de los aspectos que pesa al momento de crecer.
“En nuestro caso tomamos los pedidos y jugamos con el mismo dinero que nos entra, pero no contamos con las garantías para acceder a créditos”, dice Linares.
Y en ocasiones —según Zambrana— la conciencia de los consumidores está más orientada a lo extranjero. “Los mercados están llenos de juguetes plásticos que son más económicos y entran al país importados”, expresó la dueña del taller Mano Alternativa.
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LAS FERIAS Y SU INCIDENCIA
Silvia Tórrez, presidenta del Grupo Raíces, explica que como gremio están impulsando a ese sector porque han identificado una oportunidad para explotar y sacarle provecho al talento de estos artesanos.
“Por años han elaborado sus camiones de madera que venden en Managua y algunos puntos en el norte. Muchos niños jugaron con esos camiones que son resistentes y hasta les sirve para montarse en ellos, y de ahí es donde vemos que hay una gran oportunidad para hacer negocios”, manifestó Tórrez.
La forma en que estos artesanos han recibido apoyo es incluyéndoles en los roles de participación de las ferias que organizan en los centros comerciales, principalmente en Managua.
SIN APOYO GUBERNAMENTAL
Al ser consultado sobre la incidencia del Ministerio de Economía Familiar, Comunitaria, Cooperativa y Asociativa (Mefcca), Linares dijo que no conoce ningún plan en beneficio de ellos.
Sin embargo, el Plan del Buen Gobierno 2016 establece que los pequeños y medianos negocios de gastronomía, artesanía y agricultura familiar recibirían capital y fortalecimiento de capacidades.
“Realizaremos 255 ferias nacionales e internacionales para la promoción de productos de 12,000 protagonistas de pequeños y medianos negocios”, establece el documento como parte de los objetivos a cumplir por el Mefcca.
LAS BUENAS VENTAS
El presidente en funciones del Consejo Nicaragüense de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Conimipyme), Freddy Cruz, explica que uno de los momentos en que ese sector creciente tiene más demanda es previo a la Navidad.
“Ese es el momento en que ellos reciben bastantes pedidos y la idea es que puedan ir rompiendo paradigmas al interior del país y la población les conozca como sujetos que producen con calidad”, expresó Cruz.
El dirigente sostiene que es necesaria más promoción y que esta sea enfocada porque el gran reto, a su parecer, es el posicionamiento en el mercado.
En el istmo
No tan lejos de Nicaragua, su homóloga Honduras ha dado muestras que emprender fábricas de juguetes artesanales de madera que fomenten la creatividad de la niñez es posible. Fue así que los estadounidenses Chris y Will Haughey instalaron en el Valle de Amarateca la empresa Tegu, que se dedica a la elaboración de finos juguetes, pero que al mismo tiempo permite a sus pequeños usuarios aprender. “Creemos que todos los niños poseen la capacidad sin trabas a construir, crear e imaginar. Y ellos no solo están creando imponentes estructuras de bloques y las fortalezas de los árboles del patio trasero (mientras juegan), están construyendo su futuro”, explica el portal informativo de ese negocio ubicado en Honduras que ahora exporta 80 versiones a Estados Unidos, Canadá y ocasionalmente a países en Europa y Asia.
Importación en cifras
4.34 millones de dólares totaliza el monto por importación de juguetes durante el primer semestre de este año, según el Banco Central de Nicaragua (BCN).
16.4 millones de dólares fue la compra que se hizo desde Nicaragua de juguetes durante el 2015, equivalente a 8,232 toneladas, indican las cifras oficiales.