Cada vez que en Nicaragua se anuncia una feria de empleo, cientos abarrotan desde tempranas horas los lugares con el propósito de encontrar una nueva plaza o un mejor puesto de trabajo. Pero la probabilidad de encontrar un empleo que cumpla con las expectativas del interesado es menor, cuando al llegar a las ferias se topa con cientos de personas en la misma situación.
Joel Alberto Millón, tiene 27 años y bajo su responsabilidad económica están sus padres. Es técnico en Administración de Empresas y sigue estudiando una carrera profesional.
Tras perder su empleo hace dos semanas, Millón ha iniciado una incesante búsqueda de un empleo formal. Por esa razón cuenta que se levantó desde las 5:00 a.m. de ayer para estar lo más temprano en la segunda Feria de Empleo que organizó la Asociación de Ejecutivos de Recursos Humanos de Nicaragua (Aerhnic).
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“La verdad es que es angustiante cuando tenés responsabilidades, perdés el empleo y necesitás seguir adelante. Vine a aplicar y espero una contratación”, manifestó Millón, quien dice que las empresas no solo están buscando en el talento joven capacitación, sino también una serie de habilidades cognitivas y sociales para mayor provecho.
LO QUE BUSCA EL MERCADO
Para Jacquelinne Rivas, especialista de recursos humanos del Grupo Editorial LA PRENSA, las llamadas habilidades blandas en el profesional juegan un papel fundamental en la contratación y en la puesta en marcha de una relación laboral.
“Se busca gente que sea innovadora, que trabaje en equipo, bajo presión, que estén abiertas al cambio. Gente que pueda manejar diferentes ambientes, dinámicas y en la feria estamos identificando el talento joven que existe”, manifestó Rivas tras ser consultada.
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Para la presidenta de Aerhnic, Karla Parrales, la generación de la que forma parte Millón tiene más retos que otras, porque las tendencias a nivel global requieren profesionales más capacitados o técnicos más especializados.
“El mercado a nivel global es más exigente y Nicaragua no está exenta. Las empresas están enfocadas en que su talento humano cuente con habilidades integrales y gocen de salud emocional”, dijo Parrales.
En el informe The Future of Jobs (El futuro de los empleos), el Foro Económico Mundial muestra que para 2020 hay diez habilidades con las que debe cumplir un profesional: la flexibilidad cognitiva, capacidad de negociación, orientación de servicio, juicio y toma de decisiones, inteligencia emocional, coordinación con los demás, manejo de personas, creatividad, pensamiento crítico y resolución de problemas.
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EN CIFRAS
- 3.1 millones de personas conformaban en Nicaragua la Población Económicamente Activa, según la Encuesta de Empleo que publicó en 2011 el Instituto Nacional de Información de Desarrollo. De esa cantidad 1.4 millones son jóvenes.
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- 58 por ciento del total de la juventud nicaragüense se encuentra en una situación de subempleo, según las estadísticas nacionales.
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— Yohany López (@jonylopez14) 26 de agosto de 2016
INCIDENCIA ECONÓMICA
Para el economista y catedrático Luis Murillo, el que una economía no cuente con la capacidad suficiente para absorber la mano de obra existente es una realidad que amenaza el crecimiento sostenido y limita la mejora salarial.
“Al haber más oferta (de mano de obra) las opciones de salario se reducen”, expresó Murillo, quien cree que una opción es el fomento de los emprendimientos y su articulación con los mercados existentes.
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Pero también analiza la situación desde la raíz. “Primero debemos contar con un sistema educativo de calidad, articulado en todos sus niveles, vinculante de la teoría y la práctica, con un espíritu permanente de invención, investigación en innovación y que involucre a todos los agentes públicos y privados”, dice.