La segunda jornada en el grupo H de la Liga de Campeones reúne hoy en el estadio Sánchez Pizjuán a dos equipos, el Sevilla y el Olympique Lyon, que tienen una gran oportunidad de lavar la imagen que ofrecen en las últimas semanas en sus respectivos campeonatos domésticos, el español y el francés.
El Sevilla llega de perder en Bilbao ante el Athletic Club (3-1) y el Lyon en el campo del Lorient (1-0), aunque los dos equipos sí iniciaron con buen pie el torneo europeo.
La formación hispalense sacó un meritorio empate en Turín (0-0) ante el Juventus italiano, equipo que en los pronósticos es el llamado a ser primero de grupo, mientras que el conjunto lionés arrancó con una goleada (3-0) frente al Dinamo de Zagreb.
Sevilla y Lyon tienen como objetivo pasar a octavos de final de la Liga de Campeones y, al contar con que el Juventus será otro de los elegidos, la plaza restante del grupo se decidirá en gran medida con los enfrentamientos como el de hoy.
El entrenador de los sevillistas, el argentino Jorge Sampaoli, trabaja para que los suyos encuentren de una vez una identidad después de sufrir en Bilbao la primera derrota del curso en la Liga y mantener la mala imagen.
Pese a ello, el conjunto andaluz ha ganado sus tres citas domésticas en Sánchez Pizjuán —Espanyol, Las Palmas y Betis— y en este escenario confía para sumar ahora los tres puntos en la máxima competencia continental. Para el partido, el preparador argentino ya puede contar con el defensa francés Timothée Kolodziejczak, quien fue baja en la primera jornada de la fase de grupos debido a una sanción.
La posibilidad de utilizar a Kolo es un alivio para Sampaoli al tener lesionados a otros dos centrales, el francés Adil Rami y el portugués Daniel Carrio.
El Sevilla, además, tiene las bajas seguras del portero David Soria, del lateral galo Benoit Trémoulinas y del centrocampista danés Michael Krohn-Dehli, lesionados de larga duración, con lo que Sampaoli espera hasta hoy para ofrecer la lista de los 18 convocados.
Esquema con fisuras
Al igual que el Sevilla, el Lyon suele bajar el rendimiento lejos de su afición, aunque viajan a la capital andaluza con la intención de traerse algún punto.
El Lyon necesita un buen resultado que remonte la moral tras la mala racha y el Sevilla se ha ganado la suficiente reputación como para considerarle una presa dura.
El técnico lionés, que puede seguir apostando por el esquema 3-5-2, tiene problemas para ocupar el carril derecho con las lesiones del Rafael y Christophe Jallet.
El también galo Olivier Kemen, que ocupó el lugar frente al Lorient, demostró limitaciones para la posición, lo que puede permitir el debut de Jordy Gaspar, de 19 años.