Francisco Enrique Jiménez Aráuz, de 35 años, y Josué Leoncio Chávez Espinoza, de 23 años, admitieron ayer haber trasladado a 78 africanos ilegales desde Rivas hacia Managua, el pasado 26 de septiembre, en horas de la noche, cuando fueron capturados por la Policía Nacional.
La aceptación de los hechos acusados por la fiscal Inés Miranda la realizaron ante la juez Indiana Gallardo, titular del Juzgado Noveno Distrito Penal de Audiencia de Managua, quien se aseguró que la decisión era de libre y espontánea voluntad.
Después que la juez los declaró culpable de tráfico de migrantes ilegales, pasó al debate sobre la pena, donde la fiscal solicitó ocho años y seis meses de cárcel para los procesados, tomando en cuenta dos circunstancias agravantes, entre estas que transportaban a los ilegales en condiciones inhumanas como “ganado” y en hacinamiento y porque entre ellos llevaban a dos niños.
Además solicitó el pago de 1, 200 días multa para cada acusado. Las defensas de los acusados solicitaron la pena mínima de tres años de cárcel y 300 días multa. La judicial convocó para el día 26 de octubre la lectura de sentencia.
Hechos acusados
Según acusación del Ministerio Público, la Policía Nacional venía dando seguimiento a los procesados desde el 15 de agosto de 2016, tras conocer que estos, junto a otros individuos de identidad desconocida, se encargaban del ingreso irregular de migrantes africanos a Nicaragua, procedentes de Costa Rica.
Del primero de enero al 13 de octubre del 2016 han ingresado a los Juzgados de Managua 72 causas por tráfico de migrantes ilegales, mientras que en el 2015 ingresaron 44 causas, según datos de los Juzgados.
El Gobierno de Daniel Ortega ha mantenido una política de “no paso” a los migrantes ilegales en su mayoría africanos que se encuentran varados en la frontera sur de Nicaragua.
Ruta usada por coyotes
La ruta terrestre que usaba esta agrupación para el traslado de migrantes ilegales africanos es: desde Sapóa, pasando por San Juan del Sur, después a la Carretera Panamericana Sur, continúan su paso por Nandaime, Diriamba hasta llegar al municipio El Crucero de Managua.
En el kilómetro 17 y medio, en la entrada al Boquete, jurisdicción de El Crucero, sobre la carretera Panamericana Sur, los miembros del grupo al que pertenecen los acusados Francisco Jiménez y Josué Chávez, dejan a los migrantes africanos, para luego ser transportados por otros miembros de la organización hacia la frontera con Honduras. También ocupan la vía a San Rafael del Sur, municipio de Managua.