Sin muchas vueltas quiero precisarles hoy algunas cuestiones sobre este adverbio interrogativo o exclamativo de lugar, que lleva una tilde en la o, cuando funciona como tal, a diferencia del adverbio relativo donde, que no lleva tilde.
Dónde se usa para introducir enunciados interrogativos o exclamativos directos, y oraciones subordinadas interrogativas o exclamativas indirectas. Veamos estos ejemplos que ofrece la Real Academia Española: “¡Estás muy moreno! ¿Dónde has estado? (Morena Silencios [Esp. 1995]); “No sé dónde querés ir” (Rovner Sueños [Arg. 1985).
Puede constituir por sí solo un enunciado: ¿Quieres ponerte allí? —¿Dónde?, o quedar al final como único elemento de la oración subordinada: Me gustaría irme de vacaciones, pero no sé dónde.
En ocasiones aparece precedido de las preposiciones a, de, desde, en, hacia, hasta, para y por, con las que se indican distintas relaciones de lugar (destino, origen, situación, dirección, tránsito): ¿A dónde me llevas?; ¿De dónde venís?; ¿Desde dónde han llamado?; ¿En dónde vive?; ¿Hacia dónde se dirige?; ¿Hasta dónde piensa llegar?;
¿Para dónde vas?; ¿Por dónde se ha ido? La preposición a puede soldarse a este adverbio, dando lugar a la forma adónde (→ adónde).
Por eso cuando el verbo implica movimiento, para indicar destino, pueden emplearse las formas a dónde (o adónde) y dónde, aunque es más frecuente el uso con preposición: ¿Adónde vamos? / ¿Dónde vamos?; No sé adónde me llevan / No sé dónde me llevan. Debe evitarse hoy el uso de a dónde (o adónde) para indicar estado o situación: ¿A dónde está el director?
Con verbos que no implican movimiento, sino estado o situación, es opcional el uso de la preposición en ante el adverbio, aunque suele ser más frecuente la ausencia de preposición: ¿Dónde ha estado todo este tiempo? / ¿En dónde ha estado todo este tiempo?, pero cuando aparece precedido de la preposición según, o del verbo depender o el adverbio independientemente seguidos de la preposición de, se recomienda escribirlo con tilde, ya que en estos casos suele ser tónico y se interpreta normalmente como interrogativo: “Todo depende de dónde te pongas.” (SchzOstiz Infierno [Esp. 1995]).