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Cartas al Director

Cartas al Director

Los empresarios, los inversionistas, el sector que posee el capital, en una sociedad, están obligados a marcar pautas para el desarrollo en su país. Por una sencilla razón, la estabilidad, las condiciones legales, las políticas públicas.

Empresarios “Shakira”

Cuando Poncio Pilato se lavó las manos después de decir que no era él, quien condenaba a Jesús, sino los fariseos del sanedrín, este no sabía lo que había inventado. Sin embargo, como buen hijo (…) de Roma, jugaba con el papel de intérprete y la tonada para un ente sordo, ciego y mudo.

Los empresarios nicaragüenses hoy en día tienen una enorme Responsabilidad Social Empresarial (RSE) al participar en los asuntos públicos sociales, sobre todo, políticos. Creer que no deben inmiscuirse en la política es una soberana mentira, porque para cabildear con los que hacen las leyes y buscar tratos preferenciales, deben sentarse con quien tiene el sartén por el mango, asimismo cuando hay conflictos laborales en sus empresas, recurren al Ministerio del Trabajo para los trámites de mediación y/o la búsqueda de acomodos con resoluciones a su favor.

A veces se dice que no se debe especular, pero es obvio que no hay que hacernos tontos, para opinar sobre las consecuencias que resultarían de aprobarse en Estados Unidos (EE. UU.) la famosa Ley Nica Act., por todas las instancias de ese país. Misma que afectaría a todos los empresarios y lesionaría aún más la credibilidad del actual Gobierno, es obvio que en nada le servirán sus buenas calificaciones y su jactancia de “acertar” al crecimiento macroeconómico ante los organismos multilaterales, tales como: Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) y demás organismos de la región latinoamericana.

Sé que la mayoría de empresarios cumplen a cabalidad sus obligaciones, pero también hay un grupo al que lo único que le importa es “hacer dinero”, creyendo que están seguros, con su coqueteo y casamiento con este Gobierno, más no se dan cuenta que son los “medios para justificar los fines”. Ellos creen tener seguridad y libertad, pero se enredan, porqué estar seguro, es como permanecer enjaulado, mientras que libertad es atreverse a decir basta aunque sea solo por un minuto, como dijo: Robert T. Kiyosaki en su libro Antes de Renunciar a tu Empleo. “La libertad es más importante que la vida misma”.

Es oportuno mencionar que aspiro a ser un empresario, siendo mi propio patrón, pero quienes pueden educarnos por su amplia experiencia y persistencia, están mostrando una mala forma de hacer negocios haciéndose los sordos, ciegos y mudos, por lo que bajo el actual contexto prefiero no aprender nada con ellos. Igualmente, algunos de estos obtienen ganancias a montón, a costa del sufrimiento de miles de compatriotas que sobreviven con menos de un dólar al día, asimismo, otros ciudadanos deambulan en las oficinas de personal buscando como llenar vacantes y entregando hojas de vida en algunas de sus empresas, y otros emigran del país al norte o al sur en búsqueda de nuevos horizontes.

Finalmente, hago un llamado a los empresarios que aún sueñan en expandir el negocio: no dejen que su empresa forme parte de la lista de organizaciones, cuya información puede transitar globalmente en las redes sociales del internet, a las que no les importa los derechos de los trabajadores, sus familias y demás colaboradores.

Salomón Samuel Mendoza Suárez.

Discurso completo del Cosep

Los empresarios, los inversionistas, el sector que posee el capital, en una sociedad, están obligados a marcar pautas para el desarrollo en su país. Por una sencilla razón, la estabilidad, las condiciones legales, las políticas públicas, son favorables o no, al crecimiento económico y al progreso de los grupos financieros e inversionistas.

Lo ideal es que, el sector empresarial (genéricamente hablando), tenga capacidad de analizar e influir el ambiente político en función del ámbito económico. No es cierto que lo monetario deberá dejarse en manos de privados, solamente, y que, lo político en las decisiones gubernamentales, o en poder exclusivo de la clase política, pues la realidad social y económica no funciona de manera separada, es una relación intrínsecamente conexa. Y, desde luego, los errores de una, repercuten en la otra directamente, de manera indefectible.

Podemos separar lo económico de lo político, solamente, para hacer análisis de la realidad social, pero, jamás se podrá en la realidad práctica, tratar por separado. Esto es científico y, además, realista de acuerdo con la historia humana y social. Si algún político impone la separación de estos dos ámbitos, solo está expresando ignorancia y/o mala intención.

Recientemente la parte pública del empresariado nicaragüense, Cosep, en ocasión del día del agente económico emitió su opinión y posición en un Decálogo. Expresión que me pareció apropiada, excelente y, aunque tardía, pero, necesaria y coherente con la realidad social, política, económica y cultural de Nicaragua.

Cuando revisamos el discurso completo del Cosep (septiembre, 2016), encontramos que se refiere a otros sectores sociales y políticos de forma antipática y de adversario, por no decir de enemigos. Al parecer, por quedar bien con alguien o por tomar distancia de algún poder en el país o fuera de este.

Las organizaciones empresariales en un país están comprometidas a no tomar partido, o preferencias exclusivas de circunstancias coyunturales, sean estas políticas o religiosas. Los empresarios deben ser un faro, una guía, que ilumine y señale el camino del desarrollo sostenible, que beneficie sus intereses de inversionistas y/o empresarios. Y, como consecuencia, a la sociedad, sin caer en el penoso papel de agredir, o rechazar a otros actores en una sociedad. Los empresarios deben sustraerse del apasionado actuar partidario y/o sectorial de las ideologías. No deben dejar que los ubiquen en un ámbito de partido político, son empresarios, son inversores, son el capital.

Nicaragua necesita empresarios emprendedores, aportadores al desarrollo sostenible, con visión de nación y con intereses relacionados con sus éxitos empresariales y con capacidad para estimular un ambiente propicio para ese desarrollo estable que beneficia a todos.

Precisamente por eso, es que el país demanda empresarios que estén dispuestos a pagar sus impuestos/tributos de ley; empresarios que no le deban favores al poder político; que tengan visión de inversionistas, que piensen diariamente como deben mejorar su capacidad con responsabilidad social; empresarios que sean capaces de señalar el rumbo que la sociedad, el país, en su conjunto debe caminar, hasta lograr un desarrollo estable, duradero y sostenible.

Cirilo Antonio Otero.

La importancia de las Mipymes

Las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Mipyme) se define como todo negocio o establecimiento, natural o jurídico, urbano o rural y no agrícola de dos hasta cien trabajadores.

Por otro lado, empresa es una actividad dedicada a actividades industriales, mercantiles o de servicios generalmente con fines de lucro. En prácticamente todos los países, las micros, pequeñas y medianas empresas concentran cerca del 90 por ciento de toda la actividad comercial. Debido a su importancia crucial para la economía nacional, el gobierno y los organismos internacionales obran constantemente para promoverlas y

apoyarlas en el entorno altamente competitivo.
El lema de las Pymes en el contexto actual debe de ser: “Oportunidades para las pymes en un mundo globalizado”. Las políticas y programas deben de ser innovadores. Es de vital importancia para las pymes la innovación, tecnología, comercialización y exportaciones en la era de la globalización.

En Nicaragua uno de los principales obstáculos para el desarrollo y sostenimiento de las Mipymes está en las dificultades de acceso al crédito.

Aunque las Pymes han progresado en Nicaragua tenemos que enfrentarnos con dificultades como limitado acceso al capital, tecnología e información y métodos de comercialización inadecuados. En nuestro país más Pymes se dedican al comercio que a la industria: debemos cambiar esta relación.

La tecnología global de hoy exige que las Pymes utilicen tecnología avanzada. Es necesario establecer un mercado global de la información para permitir el intercambio de datos sobre promoción de mercados y mejoramiento de la calidad de las exportaciones.

Las Mipymes son la espina dorsal de una economía sana, y la creación de condiciones propicias para la inversión interna es la clave del desarrollo.

Finalmente, la falta de conocimientos de administración estratégica es un obstáculo serio para muchos dueños de Mipyme.

Leonel A. Marín Mc Ewan.

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COMENTARIOS

  1. Edmund Dantes
    Hace 7 años

    A los Sres Mendoza y Otero: Bravo por sus articulos. Se ve que ustedes entienden que significa la Democracia, Ciudadania y Civismo. Necesitamos dos millones de ustedes.

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