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Vladimir Putin, presidente de Rusia, visitó fugazmente Nicaragua en julio de 2014. Daniel Ortega, su homólogo nica, lo recibió durante un par de horas. Foto: LA PRENSA/Cortesía.

El presidente de la Federación rusa, Vladimir Putin, junto al comandante Daniel Ortega en julio de 2014 LA PRENSA/Cortesía.

La “Nicaragua rusa” de Daniel Ortega

Rusia dejó de mandar granos básicos o vehículos de transporte a Nicaragua. Ahora envía tanques de guerra y aviones de combate. Revista Domingo le cuenta cómo son las nuevas relaciones entre El Carmen y el Kremlin.

Vladimir Putin entró a sus anchas a Nicaragua cuando Daniel Ortega retomó el poder en 2007. Entraron Putin y su Rusia. Por un par de años, los nicaragüenses supieron de donaciones de trigo, taxis Lada y buses para transporte urbano, pero a partir de 2015 la alianza Managua-Moscú dio un giro drástico: se volvió militar. Esto ha encendido alarmas en los Estados Unidos (EE. UU.), principal aliado comercial de Nicaragua, y analizando los datos que están sobre la mesa y los que se esconden debajo de ella —mucho de la relación bilateral con Rusia es discrecional—, dos preguntas inquietan a expertos y políticos. La primera, ¿qué gana Nicaragua, su pueblo, con esta renovada “amistad” armamentística rusa? Y la segunda, ¿se está metiendo al país entre las patas de dos súper elefantes?

Una respuesta posible a la primera pregunta es “no mucho”. Los seis millones de nicaragüenses no sacan ganancias de la actual relación con los rusos, a ojos del ex vicecanciller de Nicaragua durante los años ochenta, Víctor Hugo Tinoco.

“Todo este desarrollo de las relaciones militares, esta compradera de armamento, es parte de la esperanza de Ortega de que la dinastía familiar se pueda sostener colgándose de los rusos, porque quisieron colgarse de los chinos y no se pudo, porque se cayó el proyecto del canal”, opina Tinoco.

Los buenos réditos que saca hoy Ortega, sin embargo, acarrean malos negocios para Nicaragua —añade Tinoco—, pues el país se vuelve “amigo del enemigo de EE. UU. y no conviene ese esquema”.

De hecho, en el marco de la Nica Act, en septiembre pasado, cuando el Departamento de Estado de EE. UU. leía una lista de actos de corrupción cometidos por el gobierno de Ortega al Congreso, salió bailando el tema ruso.

“Rusia es por elección el aliado en temas de seguridad de Nicaragua. Compartimos las preocupaciones del Congreso en torno a las actividades de Rusia alrededor del mundo”, dijo Juan S. González, del Departamento de Estado.

González pronunció lo anterior después de enunciar una lista de beneficios que Nicaragua obtiene del país norteamericano como su principal socio comercial en el mundo, y no son nada despreciables.

En 2016, un quinto del total de turistas que visitan Nicaragua son estadounidenses, más de la mitad del total de remesas que entran al país —y que representan el 9.1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB)— proviene de EE. UU. y el 40 por ciento de las exportaciones criollas se dirige a ese país. Rusia, en cambio, no aparece en ninguno de los tres rubros mencionados, según datos oficiales.

Para el general en retiro, Hugo Torres Jiménez, la relación con Rusia no es una normal de dos Estados buscando el bien común, sino una relación con intereses “geopolíticos y geoestratégicos de una gran potencia nuclear, como es Rusia y su líder Vladimir Putin, y un peón de esos intereses, como el presidente inconstitucional Daniel Ortega”.

“Es mucho más lo que Ortega hace perder a Nicaragua que lo que le hace ganar. Creo que ha puesto a nuestro país en grave riesgo”, agrega Torres.

Caricatura especial de Manuel Guillén. LA PRENSA.
Caricatura especial de Manuel Guillén. LA PRENSA.

EL TRIGO, LOS BUSES Y LOS TAXIS

Hubo un tiempo en que era lógico para Nicaragua ser aliada de Rusia, o más bien de la Unión Soviética (URSS). Corrían los años ochenta, la Guerra Fría aún daba sus últimos soplos, y la revolucionaria Nicaragua del Frente Sandinista, presidida por un joven Daniel Ortega y víctima de un embargo económico de EE. UU. y sus aliados, seguía las ideologías de izquierda celebradas por la súper nación de Mijaíl Gorbachov.

“La Unión Soviética fue el cordón umbilical que mantuvo viva no solo a la revolución, también a Nicaragua”, dijo Jacinto Suárez en 2013 a LA PRENSA. “Fuimos un país (…) agredido por la primera potencia del mundo, con una guerra descomunal que despertó la solidaridad del mundo y la Unión Soviética tenía un papel protagónico en esa solidaridad”. Antiguo embajador de Nicaragua en la URSS, Suárez es el actual presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del gobierno de Ortega.

Algunos creen que por esta razón el 2007 fue como un nuevo imán para Rusia. Regresó al poder Ortega y se hizo efectivo el dicho “donde hubo amor, cenizas quedan”.

De 2007 a 2014, Rusia apoyó al sector público de Nicaragua con ayuda presupuestaria, medios de transporte y equipos para el Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred), trigo, automóviles para el transporte selectivo y buses para el público, servicios a pequeños y medianos productores y asistencia humanitaria, pero desde el 2015 estas ayudas desaparecieron.

Daniel Ortega en la primera entrega de 130 buses rusos donados, en mayo de 2009. FOTO: LA PRENSA/ARCHIVO.
Daniel Ortega en la primera entrega de 130 buses rusos donados, en mayo de 2009. Foto: LA PRENSA / Archivo.

Según datos oficiales del Banco Central de Nicaragua, de 2007 a 2016, las donaciones rusas para el sector público nicaragüense ascienden a 151.2 millones de dólares, pero en 2015 y 2016 Rusia solo ha donado 1.4 millones por año al país bajo el acápite: “Servicio mecanización a pequeños y medianos productores agrícolas y ganaderos”.

En octubre de este año, eso sí, Nicaragua se convirtió en el primer país de Centroamérica con la posibilidad de producir vacunas y abaratar sus costos dentro de la nación, según un anuncio del Ministerio de Salud (Minsa). Esto gracias a la nueva Planta de Producción de Vacunas Mechnikov, que fue construida con fondos de Nicaragua y la Federación de Rusia.

Planta de Producción de Vacunas Mechnikov. Foto: LA PRENSA / Jader Flores.
Planta de Producción de Vacunas Mechnikov. Foto: LA PRENSA / Jader Flores.

Las donaciones de 200 mil toneladas de trigo, 550 taxis Lada Kalina y de 520 unidades de buses, aunque regaladas por la Federación rusa, fueron vendidas por el Gobierno de Nicaragua.

El trigo se fue “convertido en alimentos saludables” y vendido a “precio justo”, según dijo una fuente oficial de 2011 a LA PRENSA; 485 unidades de buses fueron vendidas en 32 mil dólares cada una a transportistas (para un total de 15 millones 520 mil dólares), y los taxis Lada fueron vendidos en nueve mil dólares más financiamiento a taxistas de Managua a través de la Caja Rural Nacional (Caruna) (para un total de cuatro millones 950 mil dólares). Hasta la fecha, sigue siendo un misterio cómo esta donación terminó en manos de una entidad privada como Caruna, cuya dirección maneja el círculo de Ortega.

A los pocos meses, además, numerosos conductores de buses y taxistas se quejaron de que los vehículos no estaban “tropicalizados”, es decir, estaban diseñados para las temperaturas rusas de frío extremo y presentaban daños mecánicos.

Con todo, el trigo ya fue digerido y los buses y los taxis están en uso y se siguen pagando, pero a Managua no llegaron más donaciones de ese estilo desde el Kremlin. Lo que sí llega desde el 2015, sin embargo, es armamento militar. Cincuenta tanques T-72 ya generaron todo tipo de reacciones en la región en 2016 y fuentes confiables aseguran que barcos misileros y aviones de bombas de 400 kg están en construcción o se encuentran en camino.

“Nicaragua Rusia”

 

Reconocimientos políticos

Además de una actual relación militar y estratégica entre Nicaragua y Rusia, los dos países han sido “amigos políticos” desde que Ortega asumió la Presidencia en 2007.
Osetia del Sur y Abjasia declararon su independencia de Georgia en 1991 y 1992, respectivamente, y cuando estalló la segunda guerra de estas regiones con Georgia, en 2008, y la comunidad internacional buscaba cómo encontrar una solución al conflicto, Rusia fue el primer país que reconoció los nuevos Estados. Y Nicaragua, a los pocos días, siguió su ejemplo. Además de los mencionados, solo Venezuela y Nauru, una islita del Pacífico, reconocen a las regiones independentistas en la actualidad.
Por su parte, Rusia, luego de unas elecciones presidenciales catalogadas como fraudulentas en Nicaragua el pasado 6 de noviembre, fue uno de los pocos países que reconocieron el triunfo de Daniel Ortega para su cuarto mandato presidencial.
Serguéi Lavror, ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, dijo, en nombre de su país: “No tenemos duda acerca de la limpieza de esas elecciones y creemos que es poco inteligente cuestionarlas”.
En contraparte, el principal aliado económico de Nicaragua, Estados Unidos, expresó a través del Departamento de Estado: “Estamos profundamente preocupados por el proceso viciado de elecciones presidenciales y legislativas en Nicaragua, que impidió toda posibilidad de realizar elecciones libres y justas el pasado 6 de noviembre”.

NICARAGUA SE REARMA

No, Nicaragua no está en guerra, y según Roberto Cajina, experto en Seguridad Civil, Defensa y gobernabilidad democracia, tampoco tiene conflictos bélicos a la vista, pero el país, y su Ejército Nacional, está renovando y ampliando su poder hostil.

Además de los 50 tanques T-72, el Centro de Análisis del Comercio Mundial de Armas (Cacma) asegura que Managua ordenó a Moscú cuatro lanchas patrulleras rápidas Mirazh Proyecto 14310 con ametralladoras, dos barcos misileros 1241.8 Molnia con proyectiles y un indefinido número de aviones de combate y entrenamiento Yak-130, capaces de derribar aeronaves y barcos, o de bombardear ciudades.

La orden fue publicada en abril por RIA Novosti y Sputnik News, ambas agencias de noticias controladas por el gobierno de Putin, pero ningún oficial ruso o nicaragüense ha hablado sobre ella.
Para Cajina, esto es muestra del secretismo con que el gobierno de Ortega y el Ejército del general Julio César Avilés manejan la relación con Rusia.

“Avilés solo habla de lo que se ve en este momento, que son los tanques. Hay silencio y se ha prolongado. De acuerdo con el portavoz del Cacma, el proceso de entrega del encargo de Nicaragua está en marcha. El precio de entrega de las seis piezas marítimas es de 110 millones de dólares, ¿y los aviones de combate y entrenamiento Yak-130? Cada uno cuesta 15 millones de dólares. Si se encargaron cuatro ya hablamos de 60 millones más. Y si agregamos refacciones, entrenamiento de personal y mantenimiento, pasamos los 200 millones de dólares”.

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La pregunta del millón, según Cajina, es ¿quién va a pagar todo eso? Cuando se supo de los 50 tanques por primera vez (por agencias rusas oficiales y no por la voz de Gobierno de Nicaragua), se habló de 80 millones de dólares, una suma cuestionable tomando en cuenta que Nicaragua es “uno de los países menos desarrollados de América Latina, donde el acceso a los servicios básicos es un desafío diario para la gente”, según el Banco Mundial; pero luego de semanas de especulaciones, Avilés, jefe del Ejército, salió diciendo: “Este es uno de los ejes, es la cooperación, sin que esto signifique deuda pública para nuestro pueblo. De tal manera que todo esto que miran ustedes ha sido en el proceso de gestión sin condiciones de ninguna naturaleza en la cooperación”.

Hugo Torres, general en retiro, llama a no creer que Rusia es una especie de Santa Claus para Nicaragua: “La relación entre el gobierno de Putin y Ortega no es ingenua. Es motivo de sospechas de que haya un marcado interés de inteligencia de aquellos, escondido detrás de la información pública. Las donaciones por parte de Rusia a Ortega de trigo, autobuses y sobre todo de tanques y otros armamentos no son gratis; de alguna manera se deben cobrar”.

La teoría de Cajina es que Nicaragua se va a endeudar para pagarlo. “Para mí la única explicación lógica es que sí van a tener que pagar. Y decir que íbamos a hacer una deuda de 200 o 250 millones de dólares en año electoral podía ser contraproducente. La única opción que veo es un préstamo con algún banco ruso avalado por Putin. Endeudamiento va a haber”.

Revista Domingo llamó a la Embajada de Rusia en Managua para concertar una entrevista acerca de las relaciones que entre los dos países, pero el secretario del embajador pidió que todo se hiciera por escrito y aseguro que pronto responderían. No lo hicieron. Asimismo, tratamos de hablar con el vicecanciller de Nicaragua y antiguo embajador del gobierno de Daniel Ortega en Moscú, Luis Alberto Molina Cuadra, y esto fue lo que dijo, por teléfono: “En este momentito estoy en una reunioncita acá de trabajo, en este momento no me sería posible porque tengo aquí a una gente que estamos conversando. Posteriormente me puede llamar sin problemas. Mañana (jueves), tal vez, porque hoy está un poquito complicado, yo se lo aseguro”. Se le llamó en repetidas ocasiones el jueves y no contestó.

 Por ahora, señalan los expertos, para lo único que servirán los 50 tanques rusos T-72 será para los desfiles del Ejército de Nicaragua, pues el país no está en conflictos armados. Foto: LA PRENSA / Manuel Esquivel.
Por ahora, señalan los expertos, para lo único que servirán los 50 tanques rusos T-72 será para los desfiles del Ejército de Nicaragua, pues el país no está en conflictos armados. Foto: LA PRENSA / Manuel Esquivel.

¿RUSIA COBRA EN SECRETO SUS “FAVORES”?

Otra explicación de cómo Rusia estaría cobrando tanto armamento a Nicaragua, si no es con dinero, sería la asignación de tierra agrícola y urbana. El mismo Luis Alberto Molina ofreció a Rusia cuatro millones de hectáreas prestas para trabajo de campo en marzo pasado. La noticia la publicó Sputnik News y en ella el vicecanciller decía:

“De 4.9 millones de hectáreas disponibles en el país, solo un millón está siendo trabajada, el resto espera por los rusos (…) para posicionarse en nuestro territorio”.

Pero las tierras agrícolas no serían la única forma de “pago”. Si usted ha pasado recientemente por Las Colinas, en Managua, es posible que haya notado una colosal edificación blanca de varios pisos de altura con un puente que interconecta dos estructuras. Es el flamante Centro de Capacitación Antidrogas de Centroamérica, financiado con mucho secreto por Rusia. La primera piedra ayudó a ponerla Aminta Granera, jefa de la Policía Nacional de Nicaragua en 2013, junto a nadie menos que Viktor Ivanov, exagente KGB y director del Servicio Federal de Control de Drogas de Rusia.

El importante medio británico Daily Mail y el portal digital Washington Free Beacon, publicaron en junio de este año que Moscú construye una base de espionaje en Nicaragua.
Entre la información que los diarios manejan, la base podría estar ubicada en la Laguna de Nejapa o en Las Colinas, en el centro antidrogas.

En febrero, el Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correos (Telcor) informó de la construcción de instalaciones terrenas para operar 24 satélites de la Agencia Federal Rusa de Sistema Satelital (Glonass, por sus siglas en ruso).

“Las estaciones en tierra las estamos construyendo en mayo y junio. Una vez se construyan en Nejapa, ellos (los rusos), instalan los equipos e inician a funcionar”, dijo entonces Orlando Castillo, director ejecutivo de Telcor.

A pesar de que se ha dicho que la base terrena es de uso estrictamente civil, Roberto Cajina explica que los satélites del sistema Glonass no recogen únicamente información de medioambiente, cambio climático o desastres naturales. “Lo otro es que esa información va a ser recibida únicamente por rusos, que podrán darle esa información mencionada a Nicaragua pero pueden quedarse con lo que quieran”, indica el experto.

La Laguna de Nejapa, en Managua, es donde Rusia estaría construyendo una base terrena para el control de su sistema satelital Glonass, según Telcor. Foto: LA PRENSA / Fabrice Le Lous.
La Laguna de Nejapa, en Managua, es donde Rusia estaría construyendo una base terrena para el control de su sistema satelital Glonass, según Telcor. Foto: LA PRENSA / Fabrice Le Lous.

En cuanto al centro antidrogas, que supuestamente abrirá sus puertas en diciembre, es muy poca la información disponible. Revista Domingo fue al sitio donde se está construyendo y se constató la numerosa cantidad de trabajadores rusos presentes. Se nos dijo que solo había un traductor para hablar con ellos pero que estaba ocupado y que los presentes tampoco comprendían inglés.

Al poco tiempo, salió un ruso a cargo de la empresa de ese país que construye los edificios que hablaba algo de español y dijo que no sabía para qué iba a ser utilizado el complejo, que solo podía hablar de temas de construcción. Antes de marcharse, el ruso —que no quiso dar su nombre— señaló un rótulo azul en el cual reza el nombre oficial del proyecto y recomendó buscar la casa 38 en la tercera entrada de Las Colinas, asegurando que esa era la oficina a cargo de las obras.

Más que oficina, la casa es un domicilio particular de doble portón negro donde efectivamente se encontraban dos rusos, un hombre y una mujer, pero dijeron que sus jefes no estaban.

El excanciller de la República, Víctor Hugo Tinoco, alega que “puede ser” que los rusos dispongan de luz verde para instalar bases de espionaje en el país, pero que “no sería lo más importante para ellos”.

“Ese espionaje militar”, añade Tinoco, “pueden hacerlo desde Cuba o desde Perú, donde tienen instalaciones desarrolladas. Claro, si pueden tener otro punto desde donde hacer la misma tarea, bienvenido sea para ellos, pero no es lo vital. Para mí el interés de Rusia es utilizar a Ortega como una carta de negociación a la hora que tenga que dar algo por algún problema. Tener una carta de negociación en Centroamérica que puedan ofrecer”.

En concreto, explica el político, lo que sacaría Rusia de su relación con Nicaragua es una carta de negociación “frente a los gringos a la hora que los gringos los presionen con cualquier problema en los países del este europeo o en Crimea, la parte de Ucrania que ellos invadieron”.

 Así luce el Centro de Capacitación Antidrogas de Centroamérica que Rusia construye en Las Colinas, Managua. Los responsables de los trabajos son rusos y muchos albañiles también son de esa nacionalidad. Foto: LA PRENSA / Fabrice Le Lous.
Así luce el Centro de Capacitación Antidrogas de Centroamérica que Rusia construye en Las Colinas, Managua. Los responsables de los trabajos son rusos y muchos albañiles también son de esa nacionalidad. Foto: LA PRENSA / Fabrice Le Lous.

 

Proteger el mar territorial

Roberto Cajina, especialista en Seguridad y Defensa, opina que el Gobierno de Nicaragua busca armas porque “el fallo de la Corte Internacional de Justicia del 12 de noviembre de 2012 que concedió cerca de 90 mil kilómetros cuadrados a Nicaragua en el mar Caribe, encontró al Estado con las manos vacías, sin medios ni equipos militares para vigilar, defender y ejercer soberanía”.
El experto cree que ni Daniel Ortega ni la cancillería ni el Ejército esperaban una resolución favorable y por ende no se prepararon, pero que ahora sí necesitan.
Por su parte, Víctor Hugo Tinoco, ex vicecanciller de Nicaragua, opina que esta clase de armamento puede ayudar a Ortega a garantizar el éxito de su proyecto de dinastía familiar.

Un albañil ruso trabaja en la fase final de la construcción del Centro de Capacitación Regional Antidrogas, en Las Colinas, Managua. Foto: LA PRENSA / Jader Flores.
Un albañil ruso trabaja en la fase final de la construcción del Centro de Capacitación Regional Antidrogas, en Las Colinas, Managua. Foto: LA PRENSA / Jader Flores.

MOLESTIAS EN WASHINGTON

El pasado 15 de septiembre, mientras se celebraban los 195 años de independencia de Centroamérica, se llevó a cabo en Washington DC una audiencia ante la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes. En ella se denunció un abanico de abusos y actos de corrupción del gobierno de Ortega con fechas exactas, que luego impulsaron la Nica Act. Y entre ellos se dijo lo siguiente:

“Rusia es por elección el aliado en temas de seguridad de Nicaragua. Compartimos las preocupaciones del Congreso en torno a las actividades de Rusia alrededor del mundo. Mantenemos un monitoreo cercano a la presencia de Rusia en Nicaragua”.

Quien lo dijo fue Juan S. González, subsecretario de Estado de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, y fue felicitado por Ileana Ros-Lehtinen, la congresista republicana de ascendencia cubana que coimpulsó la resolución legislativa 5708 o Nica Act.

“Mirá, los gringos son bien escuetos, no son como los latinos”, explica la exguerrillera sandinista Dora María Téllez. “Nosotros a nuestras palabras le metemos repollo, lechuga, ¿me entendés? Zanahoria, tomate, de todo. Ellos no. Ellos miden su palabra, y cuando este González dice que las relaciones entre Estados Unidos y Nicaragua atraviesan un momento crítico, él lo que está buscando es un enorme campanazo. Y cuando habla de monitoreo cercano sobre lo que está pasando entre Rusia y Nicaragua, aquí vos estás hablando palabras mayores”.

El ministro de Defensa de Rusia, Serguei Shoigu, firma un convenio con el general Julio César Avilés, jefe del Ejército de Nicaragua, en febrero 2015. LAPRENSA/cortesia.
El ministro de Defensa de Rusia, Serguei Shoigu, firma un convenio con el general Julio César Avilés, jefe del Ejército de Nicaragua, en febrero 2015. Foto: LA PRENSA / Cortesía.

Téllez está convencida de que la relación estratégica y militar entre Nicaragua y Rusia fue uno de los aspectos más importantes que tomó en cuenta el Congreso de EE. UU. para aprobar la Nica Act.

Ortega, según su antiguo compañero de lucha antisomocista, Hugo Torres, “cree ver, en sus delirios febriles que esta relación con Putin es la reencarnación de la vieja relación política e ideológica que tuvo con los líderes de la desaparecida URSS, y por eso, en su obsesión ‘antimperialista’ respecto a nuestro principal socio comercial, de manera irresponsable, no duda en meter a Nicaragua —el segundo país más pobre de América— entre las patas de los elefantes Estados Unidos y Rusia”.

Torres afirma, eso sí, que Nicaragua es soberana en decidir con quién establecer relaciones, pero insiste que estas deben valorarse “a la luz de los costos y beneficios que puedan implicar; es decir, preguntarse ¿gano más y de forma más permanente en una relación privilegiada comercial, política y de seguridad con Estados Unidos o con Rusia?”

Para él no se trata de escoger entre ambos países, sino establecer relaciones “normales, de confianza, constructivas y mutuamente beneficiosas entre las partes”.

Mientras tanto, en El Carmen, Managua, ni Daniel Ortega ni su esposa, la vicepresidenta electa Rosario Murillo, dicen algo sobre el cambio de dirección en las relaciones con el Kremlin moscovita. La discreción es total.

RusiNic1

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COMENTARIOS

  1. Miami men
    Hace 7 años

    Como se les ocurre pensar que Nicaragua solo puede vivir de ayuda en ayuda como un mendigo en un semáforo, acaso no puede ser autosuficiente como lo era en 1970, cuando producía mucho, vendía y se movía el dinero, tienen que cambiar esa mentalidad y regresar a la agricultura, la ganadería, algodoneras y el café.

  2. enrique
    Hace 7 años

    Donación , eso no existe , el trato es dame que te doy y si no me das nada en nada quedamos y eso de la famosa donación es el país quien termina pagando todo el desmadre de Daniel

  3. Tom
    Hace 7 años

    SI Rusia nos ayuda es malo, Si China nos ayuda es malo, SI Iran Nos Ayuda es malo, si Venezuela nos ayuda es malo, entonces quien nos va a ayudar, el Yanky solo nos da palo y sanciones y guerra, amigos, hay que ser lógico, Nicaragua necesita el maximo numero de mercados y toda clase de cooperación. Si somos tan selectivos nos pasará como les paso a los dinoaurios, desaparecieron de la faz de la tierra

    1. Payín Imendia
      Hace 7 años

      En verdad, don Tomas, que la abundancia de idiotas en Nicaragua es la que sostiene a ese régimen de Tacho Walker Ortega.

  4. Rodrigo
    Hace 7 años

    A largo plazo, ésto no pinta bien para Nicaragua. Apúntenlo!!!!!

  5. El Observador
    Hace 7 años

    A veces pienso que se le da demasiada importancia a las relaciones de Nicaragua y Rusia. Habría que analizar primero la clase de relaciones entre Rusia y Estados Unidos, pues aunque por razones de propaganda aparecen como dos potencias enemigas, en el fondo se llevan bien, y no desde ahora sino desde hace mucho tiempo. En la segunda guerra mundial, Estados Unidos y Rusia se aliaron para derrotar a Hitler y en ese tiempo el gobierno de Rusia era comunista. ¿ Qué objeto tendría que en los tiempos actuales lleguen a un conflicto por un pais como Nicaragua? Lo que tanto Rusia como China buscan, es expandir su influencia de negocios por todo el mundo, y eso para los Estados Unidos significa menos ingresos en sus negocios a nivel internacional. Lo demás son puras especulaciones de los que viven agitando el cotarro como un pasatiempo, o diversión

  6. Hace 7 años

    Importante las actuaciones de una parte y la otra. USA prefiere a Colombia y como tal la apoya para que ataque a Nicaragua como quiera, con la excusa de la amenaza del gobierno de Maduro. El actual presidente Santos de Colombia es un hombre bélico, arrogante y prepotente con Nicaragua y ya la ha amenazado, en tanto los USA no hace nada por evitar esto, entonces, obligan al gobierno de Daniel Ortega de prepararse para defenderse y por eso este conflicto. Los gringos traicionan y lo hacen como les da la gana,no meterán sus manos en un conflicto bélico por las defensa del territorio marítimo de Nicaragua, al contrario apoyaran a Colombia y por eso el proceso de paz colombiano para no verse enfrentado con la guerrilla en su propio territorio y en lucha en el mar. Por eso Nicaragua busca a Rusia porque así los abusos del actual gobierno colombiano los detendrá a cualquier traición, omisión y ataque a la soberanía nicaraguense.

  7. Pronóstico
    Hace 7 años

    Este asunto de las relaciones EE.UU., Rusia y Nicaragua comienza desde el regreso al poder de mico mandante(2007) y se puede resumir en una segura confrontación de los dos últimos en contra del primero, en cuanto a la duda de si nos va a meter o no entre las patas de los elefantes como en los 80’s, eso ya lo hizo, además acerca de la incertidumbre de si se va a aprobar o no la Nica Act, aprobada de manera unánime en cámara de representantes(falta el senado) recuerden que ya no estará en el poder(20/01/17) el partido demócrata y el futuro presidente(Sr. Trump) viene con todo para tratar de hacer a USA otra vez el #1 del mundo(según su campaña presedencial. Que Dios nos agarre confesados.

  8. Carlos M Alvarado
    Hace 7 años

    Los explotadores yankis no son el único mercado. Tenemos, Rusia, China, India e Iran y cuál es lo malo……

  9. ramon
    Hace 7 años

    El problema con este gobierno es q’no trabaja,en otras palabras no sabe trabajar y todo lo quiere donado,se olvido q’la Rusia ya no es comunista,por todo hay q’pagar,Nicaragua no produce producto de la estagnacia q’provoca la costumbre que todo lo queres regalado,la palabra q’se repite en este articulo es DONADO (trigo,donado;buses-donado;taxi-donado;tanques-donado)si nicaragua se dedicara ha producir no son armas lo q’trajera al pais el gobierno,trajera equipos de trabajo y no pedidos como regalo,hombre un dia hay tener verguenza y no andar pidiendo a nivel global en nombre de la solidaridad,ademas q’son 50 tanques hoy dia con las nuevas tecnologias?,no me hagas reir,a quien van a defender?,puedo decir con certeza q’representan 50 pedazos de metal no mas,pero ni a la Rusia le conviene tener un amigo como lo es Ortega,que no respeta al propio nicaraguense,se limpia con la constitucion y le vale un pepino la moral por la cual antes supuestamente lucho.

  10. Daniel Balladares Garcia
    Hace 7 años

    Q tiene q rusia apoye a nicaragua armamentistamente q pasa sin un diau colombia decida agredirlos los gringos se van a meter si mas bien ellos tienen base en ese pais.los ticos dicen ser pasifista y tienen armamento pesado ahora los EEUU deberian de crear muros de contencion al narcotrafico en estos puentes q son estos paises.
    Los q critican estos proyectos sera q amenasan algun interes. Q pasa si pone en peligro algun negocio.

  11. Tomatu Yukota
    Hace 7 años

    Bueno…..y como el dinero es “fungible”, o sea, un dia utilizas el que tienes en una bolsa y luego lo repones de “otra bolsa”, no dudemos que ortega utiliza el dinero del BID y del Banco Mundial para darselo a los rusos. Aunque luego lo reponga con el flujo de impuestos por ejemplo. Entonces esto querria decir que el dinero que los gringos le dan a ortega en prestamos a travez de esas entidades financieras, ironicamente van a parar primero a los rusos. No dudemos que esa sea una de las causas principales por la cual los gringos van a aprobar en un 100% en el 2017 el “nica act”. Ponganle sello!!

  12. el carolingio
    Hace 7 años

    Nicaragua debera pagar a Rusia con dinero, Rusia no es la dadivosa de antes y pobre como es Nicaragua sufrira mas penurias, porque si no resuelven el problema antidemocratico y se sigue manifestando como cooperadora pro-rusa creara desconfianza en los gringos quienes tampoco son mansas palomas ni ingenuos. Ortega juega con los peligros de afiliaciones entre potencias que a Nicaragua y a su pueblo no convienen

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