El próximo año Gobierno estaría subestimando una vez más los ingresos tributarios por razones no esclarecidas. Estimaciones del Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas (Ieepp) apuntan a que el próximo año se generará una sobrerrecaudación por unos 1,460.9 millones de córdobas, debido a que el ejecutivo está proyectando un incremento en sus ingresos fiscales por debajo de su verdadera capacidad de recaudación.
Según las proyecciones del Gobierno, al término del 2017 se habrá recaudado unos 67,902 millones de córdobas en ingresos tributarios, lo que significará un crecimiento de 11.43 por ciento con respecto a las metas actualizadas del Presupuesto General de la República 2016.
El Ieepp, sin embargo, considera que el Ejecutivo tiene una capacidad real de recaudar 69,363.1 millones de córdobas, es decir 13.83 por ciento más con relación a los 60,935.1 millones de córdobas que se espera captar al término de este año.
“Los diputados de la Asamblea deben interpelar al ministro de Hacienda (Iván Acosta) sobre la subestimación de los ingresos tributarios, solicitándole introduzca al proyecto de ley la metodología de cálculo de los mismos”, señala el Ieepp en su análisis sobre el proyecto presupuestario del próximo año que aún continúa en la Asamblea Nacional.
No es la primera vez
Esta no es la primera vez que el Gobierno refleja graves problemas de subestimación de sus metas fiscales, lo que a criterio de algunos economistas, denota las dificultades técnicas que tiene el Ejecutivo en materia de cálculos económicos. Esto ocasiona —han señalado—, que se restrinjan las asignaciones a los ministerios, afectando particularmente el gasto social.
En octubre de este año el Gobierno mandó a incorporar al Presupuesto General de la República 1,982 millones de córdobas obtenidos de la sobrerrecaudación fiscal, según detalle de la reforma presupuestaria que introdujo el Gobierno en la Asamblea Nacional.
Los especialistas han señalado también que esta práctica de subestimar cada año sus metas fiscales tiene como fin mantener un margen en el presupuesto para transferir recursos, durante el ejercicio presupuestario, al Banco Central de Nicaragua y aportar al logro de su meta de Reservas Internacionales, aún en detrimento del gasto social.
“Esta práctica que deriva en reformas presupuestarias, es contraria a los principios de transparencia presupuestaria. El MHCP debería de incluir en la iniciativa del presupuesto un anexo con la metodología que emplea para proyectar los ingresos tributarios por tipo de impuestos”, señala el Ieepp.
Mayor carga fiscal
Pese a que el Gobierno asegura en la exposición de motivos del proyecto de presupuesto del próximo año que las proyecciones fiscales denotan que el sistema será menos regresivo, las estimaciones del Ieepp —basado en las metas oficiales— reflejan todo lo contrario.
Señala por ejemplo, que como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB), los ingresos del Gobierno continuarán dependiendo principalmente de impuestos indirectos, es decir de aquellos ingresos que se obtienen a través del Impuesto al Valor Agregado (IVA), el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) y el Impuesto al Comercio Exterior, entre otros.
El próximo año los impuestos indirectos representarán el 9.7 por ciento del PIB, ligeramente superior al 9.4 por ciento de 2015, que es la cifra definitiva. Este aumento estaría siendo empujado por una mayor participación porcentual del IVA y el ISC.
En tanto, el Impuesto sobre la Renta (IR) representará el próximo año el 6.5 por ciento del Producto Interno Bruto, ligeramente superior al 6.2 por ciento en el 2015. “La recaudación no aporta suficientes recursos porque recae sobre los impuestos indirectos, manteniendo el carácter regresivo del sistema. La evasión y las exoneraciones y exenciones erosionan la base imponible”, afirma el centro de pensamiento.