Cerca de 200 niños y jóvenes de Managua, Granada, Mateare y Niquinohomo, celebraron con un concierto de música clásica el XXIII aniversario de fundación de las escuelas de Música en los barrios. El concierto se realizó en la Sala Mayor del Teatro Nacional Rubén Darío.
“El proyecto de Música en los barrios cuenta con cerca de 400 estudiantes, la mitad de ellos desfilaron con sus orquestas, ensamble de guitarras, flauta, coros, infantil, juvenil y percusión con el cuerpo”, destacó Paola Moreira Dávila, su directora.
“Estamos orgullosas por los resultados de estas escuelas pioneras en la formación de flauta e iniciación musical y contar con alumnos desde los 3 años a los 25, mitad hombres y mitad mujeres”, destacó por su lado Reyna Somarriba, supervisora musical.
En los últimos tres meses sus maestros de canto e instrumentos prepararon un amplio programa con música clásica, latinoamericana, folclórica y popular, explicó Somarriba.
Recorrido musical
Y así el público pudo disfrutar alegres ritmos como el Mambo de Pérez Prado, dirigido por el joven maestro Daniel Domínguez y temas como el Tico Tico de Zequinha Abreu, con arreglos de la maestra Reyna Somarriba.
El villancico tradicional Arbolito, y el Hallelujah de Leonar Cohen, dirigido por Wilmer López.
La Serenata nocturna de Wolfgang Amadeus Mozart, con la dirección de la violinista Melkycedeth Domínguez. Y el son popular de La tula cuecho de Carlos Mejía Godoy, interpretada por el Coro Infantil y Juvenil dirigido por Karla Berg.
Por su lado la joven maestra Judith Urrutia llevó a escena alumnos del Nivel II, con el tema Alma llanera de Pedro Gutiérrez; y Hugo Quiroz el grupo Ensamble de guitarra con el popular tema el Manicero.
Interpretaciones que fueron ovaciones por el público, a lo largo del espectáculo de hora y media, reconociendo los esfuerzos de los maestros y talentos de esta nueva generación de músicos.
Este recorrido musical cerró con el popular tema Vivir mi vida de Marc Anthony.