Minutos después de haber asistido anoche a una cita con el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, la coordinadora del movimiento campesino anticanal, Francisca Ramírez, aseguró haberle dejado claro que en Nicaragua “no hay democracia, ni libertad de expresión, ni respeto a los derechos humanos. Le mostré (a Almagro) que en este país el que reclama sus derechos paga muy caro”, dijo Ramírez un día después de la represión policial a los campesinos en Nueva Guinea.
“Dijimos todas las barbaridades”
“Dijimos (a Almagro) todas las barbaridades que nos han venido haciendo el Ejército y la Policía de este país”, agregó Ramírez, al tiempo que denunció que ha conocido que existe orden de captura contra ella, su esposo y su hijo mayor al igual que “andan detrás de todo el Consejo (Nacional para la Defensa de la Tierra, Lago y Soberanía)”.
“Venimos a denunciar a este gobierno que viene atropellando nuestros derechos. Tenemos una gran esperanza puesta (en Almagro) porque dice él que la OEA debe velar por la democracia y en este país no hay democracia”, dijo la dirigente al concluir la reunión.
Ramírez dijo que relató al secretario general de la OEA, la represión policial que sufrieron el miércoles los campesinos cuando intentaban llegar desde sus comunidades a Managua para participar en una marcha de protesta.
“Miramos en el campesino la rabia y el dolor que sentían porque en este país no hay libertad de expresión (…), los nicaragüenses debemos luchar para que no haya represión”, reclamó Ramírez.
Sobre la Ley 840
El canal, a cargo de la concesionaria china HKND Group, amenaza con expropiar las parcelas de tierras de miles de campesinos del sur del país que llevan dos años protestando contra el proyecto, que aún no inicia.
Ramírez expuso que presentaron un proyecto de ley para derogar la Ley del Canal Interoceánico (Ley 840), pero en la Asamblea Nacional ignoraron su petición. Ella alegó que los diputados aprobaron dicha ley y ahora argumentan que no la pueden deshacer.
En presencia de policías que resguardaban el Hotel Intercontinental Metrocentro, donde estaba el titular de la OEA, Ramírez manifestó que pudo exponer a Almagro todas las violaciones a los derechos de los campesinos. “No somos delincuentes, lo que estamos pidiendo en este país (es) que haya justicia”.
Responsabiliza a Ortega, Murillo, Policía y Ejército
Asimismo, la líder campesina responsabilizó al presidente inconstitucional Daniel Ortega, a la vocera el gobierno, Rosario Murillo, a la Policía y al Ejército de Nicaragua de lo que les pase a ella y a su familia.
“Los hago responsables de cualquier montaje que quieran hacer con mi vehículo, es mi único medio que tengo para sobrevivir con mis hijos, pero hoy me está demostrando que este es el gobierno solidario que le quita lo que uno trabaja; porque a mí nadie me lo ha regalado, me lo he ganado con dignidad y trabajando esforzadamente”, denunció Ramírez.
Relató cómo la noche del miércoles tuvo que salir en la oscuridad y utilizando veredas después que el gobierno mandó a socavar el puente El Zapote, única vía de acceso entre comunidades que convergen en la colonia La Fonseca y Nueva Guinea, “porque la Policía nos perseguía a todos los que miraba cara de campesinos como si éramos delincuentes”.
La llegada de Almagro
Almagro arribó al país antes del mediodía de este jueves, pero comenzó a recibir a los diferentes sectores del país a partir de las 3:00 p.m., en el Hotel Intercontinental. Fueron recibidos en cuatro bloques: empresarios, diplomáticos, políticos y organizaciones sociales. Extraoficialmente se conoció que recibió a una delegación de funcionarios del gobierno después de las 8:00 de la noche.
Empresarios
Los representantes del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), de la Cámara de Comercio Americana de Nicaragua y del Consejo Nicaragüense de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Conimipyme) estuvieron reunidos por más de una hora con Almagro.
Luego recibió a una delegación de diplomáticos, entre ellos el embajador de la Unión Europea, Kenny Bell, y la embajadora de Alemania en Nicaragua, Ute König.
A las 7:00 p.m. comenzaron a llegar al hotel funcionarios del gobierno, entre ellos, el jefe de la bancada oficialista en la Asamblea Nacional, Edwin Castro; el embajador de Nicaragua ante la OEA, Denis Moncada Colindres; el diputado ante el Parlamento Centroamericano (Parlacen), José Antonio Alvarado y la jefa de facto de la Policía, Aminta Granera.
Políticos juntos
El secretario general de la OEA, Luis Almagro, sentó frente a él a todos los políticos nicaragüenses que se denominan opositores, en un pequeño salón para 20 personas, según la administración del hotel.
Llegaron a partir de las 5:00 p.m., Kitty Monterrey, María Fernanda Flores de Alemán, Violeta Granera, Luis Callejas, Pedro Reyes, Alfredo César, Víctor Hugo Tinoco, José Pallais, Eliseo Núñez Morales, Venancio Berríos, Carlos Canales y otros personajes menos conocidos.