Mientras al sector industrial le preocupa la volatilidad y los altos precios de la tarifa energética, a las pequeñas y medianas empresas les inquietan los tres fuertes aumentos consecutivos que han experimentado las gasolinas y el diesel en las últimas semanas, por lo que demandan al Gobierno medidas para proteger la competitividad y a los consumidores.
Solo este reciente fin de semana las gasolinas subieron más de 1 córdoba por litro, rebasando así los cien córdobas por galón, en un mercado en el que participan empresas vinculadas a la familia presidencial.
Fue tal el incremento que en algunas gasolineras el litro de súper rozaba los 29 córdobas y los 28 córdobas la regular. El diesel, el de mayor consumo nacional, se acercaba a los 24 córdobas por litro.
De la semana del 28 de noviembre hasta la semana del 11 de diciembre, los aumentos acumulados en la súper ascienden a 8.32 córdobas; en la regular 8.62 córdobas; y el diesel 5.52 córdobas, según indicadores del monitoreo de precio de hidrocarburos del Instituto Nicaragüense de Energía (INE).
Impacta en costos
Este comportamiento alcista de precios ha impactado al sector empresarial, pues esto eleva los costos de producción, merma las ganancias de las empresas y daña a los consumidores, coinciden representantes de distintos sectores.
Freddy Cruz, vicepresidente del Consejo Nicaragüense de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Conimipyme), indica que “el incremento en los precios de los combustibles es la principal afectación de los costos de la producción de la pequeña empresa, porque tenemos que mover los productos para poder ubicarlos”.
“Nos preocupa este factor (precio de combustible), porque viene a aumentar los costos y nos afecta la competitividad… la tendencia es a seguir subiendo”, dijo Cruz.
El presidente de la Cámara de Industrias de Nicaragua (Cadin), Sergio Maltez, señala que “en la actualidad el 15 por ciento de los costos totales de una empresa son destinados para el pago de energía y el 10 por ciento a desarrollo logístico”.
“Como sector industrial tenemos las tarifas más altas de la región, desde ya estamos en desventaja en competitividad, algunas empresas lo que están haciendo es instalar paneles solares para reducir costo en el pago de energía”, explicó Maltez.
Por su parte Dean García, director ejecutivo de la Asociación Nicaragüense de la Industria Textil y de Confección (Anitec), asegura que “a nosotros nos impactan más los costos laborales que los costos de energía, con eso no le quiero decir que no hay impacto, pero en nuestro sector es un poco menor”.
Los representantes empresariales piden al Gobierno: buscar alternativas para bajar los precios de la tarifa energética y combustibles.
Juan Carlos López, del Centro Jurídico Social de Ayuda al Consumidor, reitera que es urgente crear un marco legal de regulación, “que diga cómo se van a trazar los precios, pues en la actualidad los generadores de energía pertenecen a cámaras del sector privado o tienen relación con el Gobierno, ellos definen los precios, eso no puede continuar así”.
Maltez y García coinciden en que las industrias ocupan plantas eléctricas cuando tienen que trabajar después de las 6:00 de la tarde, para reducir costos.
Precios en región
Nicaragua recupera el segundo lugar en tener los precios de combustible más caros de Centroamérica. Hace tres semanas se ubicaba en el tercer lugar, indica el Consejo Nacional de Energía de El Salvador.
Nicaragua, esta semana, tendrá los combustibles más caros del istmo, después de Costa Rica. Paradójicamente, en Panamá, que es una economía muy desarrollada, los precios son extremadamente más bajos que en Nicaragua.
En Panamá un litro de gasolina se compra esta semana en 0.73 dólares y en Nicaragua 0.95 dólares. La regular 0.69 dólares en el país canalero y acá a 0.90 dólares por litro. Y el diesel en 0.61 dólares en Panamá y en Nicaragua 0.77 dólares por litro.