Los batidos están de moda, son alimentos líquidos preparados con mezclas de diferentes productos como leche, yogur, frutas, vegetales, hierbas culinarias, semillas y cereales.
Pueden prepararse en casa o comprarse industrializados, estos generalmente se presentan en polvo, listos para añadir leche, agua o jugos de frutas.
Los batidos ofrecen la oportunidad de consumir antioxidantes y diversas sustancias nutritivas: proteínas, vitaminas, minerales, grasas, carbohidratos y distintos aportes calóricos.
Son fáciles de consumir, lo que constituye una ventaja para quienes destinan poco tiempo a la preparación y consumo de alimentos, para los que no tienen hábito de consumir frutas y vegetales en trozos o no están familiarizados con las texturas y sabores de estos alimentos.
Son útiles en planes de reducción de peso si reemplazan una comida, siempre que se controle la cantidad de calorías que proporcione.
De igual forma pueden prepararse batidos hipercalóricos e hiperprotéicos para quienes deseen ganar peso.
Los batidos de frutas no convienen para diabéticos, se absorben más rápidamente que los trozos de frutas y elevan la glucosa.
Los batidos industrializados no siempre tienen sabor agradable, algunos puede causar daño en el hígado y riñones. Es mejor optar por alimentos naturales, sin sodio, preservantes, azúcar o miel añadidos.