Aunque está previsto que en el mes de marzo se aplique el primer incremento al salario mínimo de los trabajadores del país, los maestros nicaragüenses seguirán mal pagados, siendo este uno de los factores que inciden en la baja calidad de la educación en Nicaragua según los analistas del tema.
El actual salario promedio de los maestros de primaria es de 6,600 córdobas (225.25 dólares) mensuales y el de secundaria es de 7,040 córdobas (240.27 dólares) por mes y se espera que en los próximos meses se aplique un ajuste cercano al nueve por ciento, para cubrir la inflación y el crecimiento económico del país, según la ley 625, Ley de Salario Mínimo.
Según Alex Bonilla, experto en educación del Instituto de Estudios Estratégicos de Políticas Públicas (IEEPP), para que los maestros nicaragüenses alcancen el promedio de la región se necesita un incremento de al menos un 25 por ciento.
“El trabajo del maestro no está siendo valorado, porque la retribución no corresponde con el trabajo realizado, más del setenta por ciento de los maestros están trabajando demasiado, pero además son mal pagados, sin embargo pese a eso, se sienten estimulados para trabajar lo que implica un compromiso con su labor”, dijo Bonilla.
Agregó que la calidad educativa del país depende de la formación de los maestros, pues el maestros necesita profesionalizarse pero además sentirse incentivado a través de un salario justo.
En 2016 el bono de 750 córdobas que recibían los maestros fue incorporado al salario, aún así sus ingresos mensuales no cubren la canasta básica valorada en 12,582.1 córdobas según el Banco Central de Nicaragua.