Los miembros del Frente Amplio por la Democracia (FAD) reafirmaron este domingo su demanda de elecciones libres y justas, durante una asamblea de su organización a la que asistieron más de 200 líderes locales de diferentes regiones del país.
El FAD estableció como base de sus lineamientos desconocer los nombramientos de Daniel Ortega y los diputados por considerar que fueron designados por un poder electoral afín al partido gobernante, Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), dirigido por el caudillo sandinista.
Los asistentes coincidieron en que no hubo elecciones el pasado 6 de noviembre. “Hubo una farsa electoral organizada por un sistema electoral sin credibilidad, al servicio de Daniel Ortega”. Esa afirmación la realizó Violeta Granera, miembro de esta organización.
Ortega impuso su tercera reelección desde 2007 en las votaciones del 6 de noviembre, con su esposa Rosario Murillo, quien fue designada vicepresidenta por el tribunal electoral.
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Sin credibilidad
Dichos comicios se caracterizaron por la abstención ciudadana, evidente en la rala asistencia en los 4,308 Centros de Votación instalados a nivel nacional, aunque el CSE asegura que hubo una participación del 68.2 por ciento.
Dichos comicios fueron considerados una farsa electoral por la oposición política, que fue excluida del proceso electoral por el FSLN. Hasta junio pasado, Violeta Granera era la candidata a vicepresidenta por el Partido Liberal Independiente, liderado entonces por Eduardo Montealegre hasta que la CSJ despojó del partido al político opositor y dejó sin casilla al bloque alrededor suyo.
En la actividad de este domingo participaron representantes de organizaciones civiles y políticas, entre ellas Moisés Hassan, presidente del Partido Acción Ciudadana (PAC); Ana Margarita Vijil, presidenta del Movimiento Renovador Sandinista y algunos diputados como Eliseo Núñez Morales y Armando Herrera.