Una sobrecarga de energía proveniente de Panamá fue la causa principal de la falla eléctrica, ocurrida este pasado lunes, según el comunicado del Ente Operador Regional (EOR).
El documento explicó que resultó “aislado por completo el sistema eléctrico de Nicaragua del resto de países, con un desbalance de su carga y generación, lo que significó un apagón de energía temporal y parcial en la que dicho sistema eléctrico se desconectó el 52% de su demanda energía eléctrica”.
De acuerdo con el comunicado del EOR, la falla eléctrica transitoria se caracterizó por diversos eventos en el Sistema Eléctrico Regional (SER); entre estos, el disparo en las líneas de transmisión Masaya-San Martín de 230 kilovoltios, ubicadas en el área de control de Nicaragua, lo cual generó “oscilaciones electromecánicas no amortiguadas en todo el SER y desconexión en el sistema eléctrico de Nicaragua”.
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Además del problema que surgió en Nicaragua también fue evidente la desconexión de la línea de transmisión Ticuantepe-Cañas, entre el sistema eléctrico de Nicaragua y Costa Rica; desconexión de la línea de Panaluya-San Nicolás, correspondiente al sistema eléctrico de Guatemala y el sistema eléctrico de Honduras; disparos en la línea de interconexión entre El Salvador y Honduras, y la línea de interconexión Guatemala-México.
La sobrecarga provocó, según reza el comunicado, que el SER quedara dividido en dos bloques; al norte, Guatemala-El Salvador-Honduras, y al sur, Costa Rica-Panamá, por lo que se activó el Esquema Regional de Desconexión Automática de Carga por Baja Frecuencia (EDCABF), lo que provocó el aislamiento por completo del sistema eléctrico de Nicaragua del resto de los países.
Según el EOR, las interconexiones entre los países del SER se restablecieron cerca de los 20 minutos; sin embargo, el sistema eléctrico de Nicaragua se restableció aproximadamente a los 57 minutos; puesto que fue el país que experimentó mayor afectación.
De acuerdo con el análisis del experto ingeniero eléctrico Fernando Bárcenas Molina, el apagón del lunes evidenció dos debilidades: una es la falta de estabilidad en el sistema y la otra, la necesidad de construir una línea de transmisión entre Masaya y Rivas.
Nuevas líneas
Por su parte, el lunes, el presidente de la Empresa Nacional de Transmisión Eléctrica (Enatrel), Salvador Mansell dijo que “de igual forma, estamos viendo la regulación automática en las diferentes plantas, para dar una respuesta más rápida; pero de igual manera la construcción de tres líneas disponibles, entre ella la Virgen-Masaya, para fortalecer el corredor de energía en lo que es la zona sur”, refirió.
En ese sentido, Bárcenas explicó que con la construcción de un circuito doble en la subestación Masaya-Rivas no se hubiera dado una sobrecarga en el sistema.
“Lo primero que habría que señalar es que se requiere un fortalecimiento en la conexión de transmisión entre Amayo (Rivas) y Masaya, ya que por allí circula la generación eólica, por eso Mansell anunció que se construirá un doble circuito en esa sección de la red de transmisión, de modo que en caso de transmitir una transferencia de energía hacia las interconexiones regionales no se produzca una sobrecarga que genere una contingencia en nuestro sistema”, valoró Bárcenas.